Derecho a la identidad de infancias trans: los temas pendientes

Por: Eridani Palestino
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La directora de la Asociación por las Infancias Transgénero, Jennifer Blanco, manifiesta que el trámite de corrección de acta de nacimiento para infancias trans y no binaries en la CDMX no debería tener un límite de edad

El gobierno de la Ciudad de México emitió un decreto en 2021 para que infancias trans y no binaries mayores de 12 años tramiten la corrección de su acta de nacimiento acorde a su identidad mediante un proceso administrativo que no implique un largo recorrido por juicios costosos y lentos que provoquen actos de discriminación y revictimización.

Esto abrió una vía para que las demás modificaciones a documentos oficiales como CURP, certificados de estudios, pasaporte, seguridad social, entre otros, sean más sencillas de llevar a cabo. La directora de la Asociación por las Infancias Transgénero, Jennifer Blanco, afirma que aunque es un gran avance en la agenda de derechos de este grupo poblacional, aún faltan acciones legislativas concretas para que el trámite no se limite a esa edad.

“Nos parecería muy importante que si estamos hablando de una ‘ciudad de derechos’, pues que realmente empecemos a pensar en las infancias, que empecemos a protegerlas, porque definitivamente una persona trans no nace a los 18 años y tampoco una persona trans necesita cumplir los 12 años para nombrarse”, comenta en entrevista para + Chilango.

Señala como ejemplo el caso de Jalisco, el primer estado de México en reconocer a las infancias y adolescencias trans sin importar la edad o el lugar de nacimiento, siempre y cuando quien realice el trámite tenga nacionalidad mexicana.“Hemos tenido muchas familias que han tenido que viajar para allá para poder hacer esta corrección.

Es una limitante muy importante que afecta porque, si nos enfocamos en el tema escolar, tenemos infancias a las cuales les exigen que tengan sus documentos corregidos; esto sucede en escuelas públicas o privadas, pero les hacen esta exigencia para poder respetarle el nombre, el uniforme y lo más preocupante, el uso de los baños”, apunta.

En su informe Cinco Años de #InfanciasTrans 2018-2023 se refiere que Jalisco y Ciudad de México son las entidades que más trámites han llevado a cabo para reconocer la identidad de género en infancias y adolescencias, con 118 y 186, respectivamente.

La Asociación para las Infancias Transgénero se creó en 2018 como una organización sin fines de lucro para brindar atención gratuita a familias con infancias y adolescencias trans y no binaries en temas legales, educativos y pedagógicos.

Una deuda pendiente


Jennifer Blanco menciona que un tema pendiente es la postura oficial de la Secretaría de Educación Pública (SEP) sobre cómo deben actuar los centros educativos con las infancias trans y no binaries.

“Muchas veces no se les niega el acceso a la escuela. Que sí hemos tenido casos en donde les han negado una reinscripción alegando que no tienen la infraestructura necesaria para atender a una infancia trans, pero bueno, en su mayoría no les niegan el acceso, pero lo que sí sucede es que viven discriminación, bullying, y no sólo entre xadres, sino a veces el personal docente está violentando a las infancias”.

Aclara que aunque ha existido la intención de hacer un cambio, incluso con el programa educativo de la Nueva Escuela Mexicana, que integró por primera vez a los libros de texto el tema de la identidad de género, “lamentablemente no podemos esperar a que las nuevas generaciones crezcan con estos nuevos libros y pasen 10 años para que tengamos este cambio en la forma de pensar”.

A pesar de que hay buenas intenciones, sostiene, “sí requerimos que se tome una acción más contundente, porque de otra manera no tenemos la certeza de que les puedas respetar a las infancias en las escuelas”.

Alta deserción escolar


Jennifer Blanco señala que en los formularios que aplican a las familias que acompañan en el país se ha detectado que entre los 12 y 15 años de edad es cuando está “más alto” el nivel de deserción escolar, porque no hay apoyo por parte de la autoridad educativa. “Prefieren ya no ir a la escuela para no estar viviendo todos los días violencia, discriminación y demás”, indica la directora de la asociación, aunque no refiere alguna cifra concreta.