Con estos consejos podrás optimizar tus tiempos de estudio y aprenderás a organizarte mejor, cortesía de Random House*
El tiempo, tu mayor tesoro
• Sé realista cuando determines horarios de estudio, no sólo tomes en cuenta clases, sino otras actividades, responsabilidades (pasear a tu mascota, por ejemplo) y tiempo libre.
• Asigna tiempo a cada materia: siempre más tiempo para los temas y materias que te cuestan más; agenda repasos y tareas desde el momento en que te las asignen.
• ¡Toma descansos obligatorios! Detente, respira, estira tus brazos y ejercita las manos. Levántate y muévete un poco para evitar la fatiga. Te recomendamos la técnica Pomodoro, que permite administrar el tiempo de forma eficiente según prioridades, ciclos de concentración y distracción.
Organiza tu espacio
• Busca un sitio tranquilo, con buena luz y sin distracciones para entrar en modo zen.
• Prepárate para la batalla: libros, cuadernos, plumas, colores, ¡ármate de todo lo que necesites para conquistar el conocimiento!
• Orden para el éxito: recuerda siempre que un espacio limpio y ordenado te ayudará a concentrarte mejor y optimizar tu energía. ¡Adiós, caos!
Equilibra, cuerpo y mente
• Duerme lo suficiente: 7-8 horas por noche en una postura relajada, a temperatura templada.
• Consume tus tres comidas y un snack mientras estudias. Aléjate del azúcar, ya que los picos de glucosa pueden ser muy contraproducentes y provocarte cansancio, fatiga mental y dificultad para concentrarte.
• Tu arma más definitiva contra el estrés es el ejercicio; no lo dejes de lado y valora cómo despeja tu cabeza, pulmones y corazón. Tus hobbies y tiempo con la familia también son vitales.
*Texto adaptado para + Chilango