La Organización Mundial de la Salud y el Fondo de las Naciones Unidas para la Infancia estiman que 2.7 millones de menores no tienen ninguna dosis o carecen de un esquema de inmunización completo
En comparación a los años anteriores a la pandemia de Covid-19, los niveles de cobertura mundial de vacunación infantil se estancaron en 2023, de acuerdo con datos de la Organización Mundial de la Salud (OMS) y del Fondo de las Naciones Unidas para la Infancia (Unicef). La estimación más reciente es de 2.7 millones de menores sin ninguna dosis o sin esquema de inmunización completo.
Aunque quienes recibieron las tres dosis contra difteria, tétanos y tos ferina (DTP) el año anterior se mantuvo estable con 84%, es decir, 108 millones, a quienes no les aplicaron una sola dosis de la vacuna aumentó de 13.9 millones en 2022 a 14.5 millones en 2023. Además, 6.5 millones no completaron su tercera dosis, necesaria para lograr la protección frente a la enfermedad durante la lactancia y en los primeros años de vida.
Este sector de la población vive en 31 países afectados por conflictos y en contextos inestables, donde los niños y niñas son especialmente vulnerables a enfermedades prevenibles, debido a la falta de acceso a la seguridad, a la nutrición y a los servicios de salud.
“Cerrar la brecha de inmunización requiere un esfuerzo mundial para que gobiernos, los aliados y los dirigentes locales inviertan en atención primaria de salud y en trabajadores comunitarios a fin de garantizar que todos los niños y niñas sean vacunados y que se refuerce la atención sanitaria en general”, afirmó Catherine Russell, directora ejecutiva de la Unicef.
En la Agenda de Inmunización 2030 (IA2030) se destaca que para prevenir brotes de sarampión, evitar muertes innecesarias por esta enfermedad y alcanzar su erradicación, la cobertura de vacunación debe ser de 95%, sin embargo, en 2023 sólo 83% de lxs pequeñxs recibieron su primera dosis, mientras la segunda alcanzó sólo a 74%.
El sarampión afecta actualmente a 103 países, donde viven aproximadamente tres cuartas partes de los lactantes del mundo, en contraste, en 91 naciones con una alta cobertura de vacunación contra este padecimiento, no sufrieron brotes.
Otro de los focos de atención, es la vacunación contra el virus del papiloma humano (VPH) causante del cáncer cervicouterino, ya que la meta de la OMS es cubrir 95% a nivel mundial, sin embargo, sólo llega a 56% de las adolescentes en territorios de ingresos altos y 23% de ingresos bajos y medios.
Ante este escenario en el planeta, el Consejo de Asociados de la IA2030 exhortó a que los gobiernos inviertan más en innovación y a colaborar más en la materia. Además recomendó mejorar la inmunización sistemática como parte de sus programas integrados de atención primaria de salud, con el respaldo político, liderazgo comunitario y financiación sostenible.
Entre 2010 y 2018, sólo con la vacuna contra el sarampión se evitaron 23 millones de muertes. El número de menores de un año vacunados anualmente (más de 116 millones, es decir, 86% de los bebés nacidos) alcanzó el nivel más alto jamás notificado.
Desde 2010, 116 países introdujeron vacunas que no usaban anteriormente, entre ellas, las dirigidas contra afecciones tan mortíferas como la neumonía neumocócica, la diarrea, el cáncer de cuello uterino, la fiebre tifoidea, el cólera y la meningitis.
