Fotografía: Shutterstock
La doctora Terry Walsh cuenta que ella pasó cuatro años en una silla de ruedas debido a su condición de esclerosis múltiple progresiva
También nos cuenta que gracias a un cambio radical en su alimentación y estilo de vida, volvió a montar de nuevo en bicicleta. Walsh, profesora de la Universidad de Iowa, ha conducido varios protocolos dietéticos específicos para mejorar los síntomas de la esclerosis múltiple. En general recomienda una dieta paleo (cuyo nombre viene de “paleolítica”), en la que se incluyan verduras verdes, betabel, zarzamora, fresas, carne magra, pescado fresco y algas marinas para prevenir los síntomas de fatiga que padecen las personas con esta condición. También recomienda limitar el consumo de grasas a 15 gramos al día y reducir al mínimo los azúcares.
Emociones y esclerosis múltiple
Culpa, miedo, tristeza, negación, impotencia y depresión, pueden ser algunas de las emociones que viven pacientes con esclerosis múltiple. Las esencias florales pueden ser un gran aliado para:
- Aceptar la enfermedad.
- Reconstruir lo que ha pasado y verlo desde otro enfoque.
- Afrontar la enfermedad desde otra perspectiva.
Masaje y esclerosis múltiple
El masaje alivia a reducir el dolor, a aumentar la flexibilidad y a que la o el paciente se sientan menos estresados. Puede utilizarse un aceite de masaje muscular que ayude a promover una mejor circulación y que al mismo tiempo brinde motivación y una mente despejada.
Yoga y esclerosis múltiple
El ejercicio es fundamental y, particularmente, el yoga puede apoyar a pacientes con esclerosis múltiple a reducir el estrés, la depresión y a mejorar la fuerza, la flexibilidad y la mejora de su oxigenación pulmonar.
Esta rutina sencilla puede realizarse manteniendo atención en la respiración y permitiendo que sea rítmica. Contando 5 tiempos para inhalar, reteniendo un tiempo, exhalando lentamente otros 5 tiempos. Repite tres veces y cambia de postura. Permanece al menos 5 minutos en la postura de savasana (boca arriba, con las piernas y los brazos separados, con las palmas de las manos hacia arriba).
Suplementación
De acuerdo a estudios realizados por la Sociedad Nacional de MS de los Estados Unidos, los suplementos de omega 3 y aceite de pescado pueden tener efectos benéficos contra la esclerosis: menor tasa de brotes, mejores resultados en los marcadores de inflamación y mejor calidad de vida.
Estas sugerencias son complementarias a un tratamiento médico profesional: no sustituyen ninguna terapia ni medicamento.
Texto por Ana Paula Domínguez
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