Hemodiálisis gratuitas, una esperanza de vida para las infancias chilangas

Por: Redacción
Compártelo en tus redes...

Las infancias que no cuentan con seguridad social tienen una opción en el Hospital Pediátrico Iztacalco, el único de la Sedesa que ofrece estos tratamientos gratuitos

Por Miriam Jiménez

El Hospital Pediátrico Iztacalco se convirtió en la primera unidad médica de la Secretaría de Salud (Sedesa), en coordinación con el IMSS-Bienestar Ciudad de México, en ofrecer el servicio de hemodiálisis gratuitas para infancias de nueve a 17 años que años que no cuentan con seguridad social.

En entrevista para + Chilango, la doctora Ericka Villalobos, encargada del área de Nefrología y Hemodiálisis de este nosocomio, explica que la hemodiálisis es uno de los tratamientos que reciben las y los menores que presentan una falla renal, además de la diálisis peritoneal y el trasplante de riñón.

Este procedimiento permite que lxs pacientes sigan con vida hasta que se lleve a cabo el trasplante. En cuatro meses, con el nuevo equipo, se han realizado 81 sesiones. “La hemodiálisis se realiza por medio de un catéter en el cuello, para ello se requieren venas en buenas condiciones, es decir, que no se hayan sometido previamente a un tratamiento con catéter.

Las personas que se someten a esta terapia, deben asistir al hospital tres veces por semana para realizarse su sesión de hemodiálisis, con una duración de entre tres y cuatro horas. Es primordial que los pacientes no interrumpan su tratamiento, porque hacerlo puede provocar que la sangre se intoxique, se acumule el agua y como consecuencia, la salud del paciente se agrave”, subraya.

Hasta el momento, dice, la insuficiencia renal se relaciona con un tema congénito, pero hay otras enfermedades en las que las defensas atacan al organismo, como el lupus eritematoso sistemático, que, en caso de no someterse a un tratamiento, puede afectar considerablemente al órgano vital. Las piedras y/o infecciones recurrentes también pueden afectar al riñón. 

Signos de alarma y tratamiento

La doctora Erika Villalobos detalla que algunos signos de alarma que pueden conducir a un diagnóstico temprano son las infecciones constantes en vías urinarias y que lxs pacientes mayores de cinco años sigan haciéndose pipí en la cama.

“Lo ideal es que, una vez que un bebé o un niño sea diagnosticado con una infección urinaria, se le realice un examen general de orina y una vez que los resultados sean positivos, se lleve a cabo un ultrasonido y una valoración, que inicialmente puede ser por su pediatra.

En caso de que se siga presentando, será necesario que el paciente asista a una consulta con un médico especialista en urología o necrología”. Una infancia diagnosticada con una insuficiencia renal va a requerir cuidados toda la vida, explica la especialista.

Incluso, quienes reciben un trasplante estarán bajo tratamiento el resto de su vida. Un catéter, por ejemplo, puede ser utilizado desde dos meses hasta tres o cuatro años.

El cuerpo tiene seis puntos donde se puede colocar, pero si se contamina o se tapa y lo mismo sucede con el resto de los puntos, puede que en un año la persona ya no tenga un espacio disponible para que continúe con la hemodiálisis.

Cuanto más tiempo pase el paciente en una diálisis, tiene más riesgo de que se dañe su corazón y otros órganos, por consecuencia, el momento del trasplante se aplaza.

hemodialysis room equipment

Cuidados y restricciones

Al ser un tratamiento suministrado a través de una vena en el cuello, lxs pacientes deben observar cuidados específicos para que la hemodiálisis y el catéter no resulten afectados. No pueden meterse a una alberca y a la hora del baño debe tener ciertos cuidados, pues el parche del catéter no debe estar mojado, tampoco puede practicar deportes de contacto.

“Cada paciente lleva una dieta diferente que va a depender de las necesidades específicas del menor, la cantidad de agua que pueden ingerir, la cantidad de proteína y sales, así como la prohibición de otros que son altos en sales. Sí llevan una dieta específica, sí tienen actividades y cuidados específicos, pero finalmente es la forma de mantenerlos estables para poder llegar al objetivo es llegar al trasplante renal”.

Continuous renal replacement (CRRT) with blood line dialysis set and installation at critical care unit (CCU)

Acompañamiento

La familia debe recibir apoyo psicológico, específicamente cuando lxs pacientes pasan a un protocolo de trasplante. Una persona profesional de la psicología o la psiquiatra, de la mano de especialistas, deberá determinar si la infancia es candidata a un trasplante de riñón, ya que si se trata de pacientes con poco compromiso en el tratamiento, el trasplante podría no funcionar.

“En la parte de trabajo social, se cuida que tenga todas las condiciones para que, por ejemplo, el paciente que esté en hemodiálisis tenga todo para prevenir infecciones que derivan en una complicación”, agrega Ericka Villalobos. Cuando lxs médicos agotan las alternativas para efectuar una hemodiálisis y el trasplante se convierte en una posibilidad lejana, las infancias son incluidas en un programa de cuidados paliativos, porque médicamente ya no hay más que ofrecerles.