!Atención ciudadano! Pase a recoger su Primer libro de actividades subversivas, y resuelva con sus hijos la clásica sopa de letras en la que deberán encontrar las palabras: desempleo, pobreza, narcotráfico, televisión, basura, smog, entre otras; ó unan los puntos siguiendo la secuencia de números para formar al Winnie Poo que va vestido de soldado y apuntando con una metralleta; ó tracen la línea para ayudar al ciudadano a salir del laberinto sin toparse con encapuchados ó militares.
Éste libro lo podrá obtener en el Condo Museo del Chopo Ballard, un impecable edificio de condominios de lujo, donde el confort y el estilo se conjugan en todas las comodidades dignas del siglo XXI: locales comerciales, bares que ofrecen cocteles de lujo, plaza de toros, museo interactivo y hasta una sala de conciertos para pop nacional.
Ahí apenas dos de las piezas que componen Infiernos Artificiales. ¿todavía estaremos a tiempo de reflexionar sobre la situación actual de nuestro país, ó sería mejor irlo dando por hecho para enfrentarlo? La muestra toma como premisa la frase del escritor francés Jacques Bersani “cultiva el desorden para poder inoculárselo a otros que lo vivirán” y entonces habla de las profundas crisis en las que estamos metidos: económica, social, mediática, política, democrática, y hasta inmobiliaria, como asuntos cotidianos de los que como ciudadanos hoy y en el futuro próximo aparentemente no podemos escapar.
Por otro lado retoma su nombre, del título del texto que escribió André Bretón en 1921, cuando el movimiento Dadá arrasó las calles de París revelándose contra las formas convencionales de hacer arte, asunto que se convierte en el método de trabajo para el colectivo de trece artistas que conforman la exposición.
(Aretha Romero)
