Un pequeño aficionado al futbol, quien vivió con leucemia casi nueve años, decidió dejar su tratamiento para vivir bien el resto de los días que le quedaron
Las redes sociales de los fanáticos del Cruz Azul y los medios deportivos nacionales se llenaron de homenajes para José Armando, un pequeño veracruzano de 13 años, quien después de luchar nueve años contra el cáncer murió el 23 de abril pasado en su natal Xalapa. El caso de este joven aficionado al fútbol levantó opiniones de propios y extraños, luego de que se difundió su decisión de interrumpir el tratamiento de quimioterapia contra la leucemia con la que vivía desde los cinco años. Su madre, a quien le hizo la petición, estuvo de acuerdo en respetar los deseos de su hijo, quien hasta entonces había pasado por más de 100 quimioterapias.
Programas de televisión, periódicos deportivos e incluso el equipo del Cruz Azul hicieron eco de los deseos de José Armando, antes de su muerte. El médico y escritor Arnoldo Kraus abordó el tema, en una historia publicada por la Gaceta UNAM: “está pidiendo que lo dejen estar como está, vivir lo que pueda sin tratamientos, y estoy seguro que en su pensamiento o platicando con la gente que conversa al estar en las sesiones de quimioterapia ha definido que no quiere continuar el camino de vivir bajo una rutina frecuente, dolorosa, incómoda e incapacitante de quimioterapias”.
El jovencito pasó sus últimos días en el Centro Estatal de Cancerología, bajo cuidados paleativos, concentrado en “divertir la vida”, como declaró ante un medio televisivo. Su familia y amigxs celebraron a lo grande su cumpleaños y el sueño de su vida, conocer a los integrantes de su equipo de fútbol favorito, casi se hace realidad, pues aunque el Cruz Azul lo invitó a asistir a uno de sus partidos, el pequeño no pudo asistir por su condición de salud; sin embargo, uno de los tres goles con los que los cementeros le ganaron a las Chivas en la jornada 10 del Torneo Clausura 2024 se lo dedicaron a José, para quien mandaron a elaborar una playera especial, con el número 14.
¿Qué es la ortotanasia?
La decisión que tomó José Armando a su corta edad tiene un nombre: ortotanasia, que de acuerdo con el Instituto Nacional de Ciencias Médicas y Nutrición Salvador Zubirán se refiere a permitir que la muerte ocurra “en su tiempo cierto”, “cuando deba de ocurrir”, por lo tanto los profesionales de la salud están capacitados para otorgar al paciente todos los cuidados y tratamientos para disminuir el sufrimiento, pero sin alterar el curso de la enfermedad y por lo tanto el curso de la muerte. Aunque en México la eutanasia no está permitida, la ortotanasia, en cambio, está regulada en la Ley de Voluntad Anticipada.
Bióetica
La eutanasia, ortotanasia y distanasia son tres conceptos que se abordan desde la bioética, de acuerdo con fuentes citadas por el Inapam. Mientras que la eutanasia es el acto deliberado de dar fin a la vida de un paciente, a petición suya o de sus familiares, “la distanasia, también llamada encarnizamiento terapéutico, es el uso de terapias desproporcionadas en relación a los riesgos y beneficios, prolongando la agonía, más que ofrecer elementos curativos”.
