Fotografía: cortesía. Texto por Stefania Fibela.
El arquitecto ruso-mexicano realizó sus obras principalmente en Las Lomas y Polanco; sin embargo, su legado e influencia es poco conocido. Algunos de sus proyectos en la ciudad sobreviven; otros, no
Vladimir Kaspé era originario de Harbin, un pueblo en la región de Manchuria (China), cuando esta era parte de Rusia. A los 16 años dejó su pueblo natal para estudiar arquitectura en la Escuela de Bellas Artes de París; allí conoció a Mario Pani, quien sería su amigo de muchos años. Tiempo después, debido a la Segunda Guerra Mundial, Kaspé llegó a México en 1942 por invitación de Pani con sólo un billete de 500 dólares escondido en un envase de pasta dental.
Kaspé tomó algunas clases de español y pocos meses después comenzó su trabajo como jefe de redacción de la revista Arquitectura, en donde ya había participado como corresponsal en Europa. Al mismo tiempo, y por invitación de José Villagrán, se convirtió en profesor de la UNAM en 1943. La docencia se convirtió en una parte importante de su vida, pues también dio clases en la Universidad Anáhuac, Iberoamericana y La Salle.
Aunque participó en obras públicas como el Conjunto Habitacional El Rosario, la mayoría de sus proyectos eran de origen privado. El primero en el que trabajó en el país fue el Hospital Israelita de México en 1942, pero éste no se concretó, por lo que su primera obra construida fue una casa en la colonia Anzures en 1943.
También creó dos centros escolares muy diferentes entre sí: la Escuela Secundaria Albert Einstein y el Liceo Franco Mexicano. El primero lo construyó en 1946 con el apoyo del Comité Central Israelita de México, solicitando la autorización del mismo Einstein para que llevara su nombre. El segundo fue inaugurado el 9 de agosto de 1952. Tiene un mural de Jean-Pierre Geoffroy-Dechaume que representa las diferencias y convergencias entre las culturas francesa y mexicana.
En 1955 construyó un club deportivo privado en Aristóteles 239, colonia Polanco. Este proyecto contaba con dos albercas, cancha de tenis, plataformas de boliche, cafetería, gimnasio-frontón, salón de fiesta, terraza y dos apartamentos para huéspedes. Un detalle importante es que las rejas de la alberca fueron diseñadas por Mathias Goeritz. Hoy esta obra ha sufrido varias modificaciones, principalmente en la fachada, pero se puede visitar porque dentro se encuentra el Centro Vasco-Euskal Etxea.
A pesar de la influencia de Kaspé en la arquitectura de la ciudad, no se cuenta con un registro confiable de todos sus trabajos, lo más cercano que existe es una lista escrita por él mismo de 1952 a 1965. Es posible que su obra rebase los 200 proyectos, de los cuales sólo se construyó un tercio, y de estos, muchos han sido olvidados o demolidos.
Obra cumbre
Uno de sus trabajos más representativos fue el Super Servicio Lomas, construido entre 1948 y 1952. Inaugurado el 23 de noviembre de 1948, fue el primer edificio multifuncional de México al contar con una gasolinera y gran variedad de locales comerciales como una llantera, una tienda de electrodomésticos, una agencia de motocicletas, el Banco Internacional y, por 50 años, una agencia de General Motors. A pesar de su importancia, fue demolido en 2011 para dar pie a la Torre Virreyes, también conocida como “El Dorito”. Durante la construcción del nuevo edificio se propuso la creación de un museo dedicado a Kaspé, pero no se logró.
*Texto adaptado para Máspormás
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