En cartelera
La línea que divide la mera observación del juicio es muy delgada, pero el director de cine francés François Ozon ha sabido manejar esto en sus cintas. Meticuloso, perverso y directo, el creador ha dedicado su carrera a explorar la sexualidad humana con curiosidad y sin prejuicios.
Su más reciente película, Una nueva amiga, se centra en la historia de dos amigas que crecieron juntas y mantienen una amistad muy unida. Tanto que una de ellas, antes de morir, le pide a la otra que se encargue de cuidar a su marido y a su bebé cuando muera. Pero la amiga se encuentra una sorpresa al acercarse a esta familia, pues el viudo recupera un viejo hábito: vestirse de mujer. A pesar del desconcierto, estas dos personas empiezan una amistad fuerte. Una nueva amiga es un relato sobre la construcción de las identidades y un homenaje a las personalidades complejas y libres de nuestros tiempos.