El gobierno de la CDMX informó que para la modernización del Hospital General Rubén Leñero, que ahora incluye una sala de trauma-choque y un nuevo tomógrafo, se invirtieron 11 millones de pesos
El gobierno de la CDMX informó que para la modernización del Hospital General Rubén Leñero se invirtieron 11 millones de pesos. “Hay una sala de trabajo, el quirófano para cirugías ambulatorias y la sala de trauma-choque para cirugías más complejas; luego pasamos a la sala de rayos X y la cereza del pastel, un tomógrafo nuevo”, comentó el mandatario local, Martí Batres, al término del recorrido por el nosocomio.
Además de estas adiciones tecnológicas, ahora cuenta con dos nuevos quirófanos de corta estancia, uno de ellos especializado en la reconstrucción de pacientes con quemaduras y lesiones graves ocasionadas por accidentes. Esta iniciativa operará en conjunto con el Hospital General La Pastora, en proceso de remodelación, para ofrecer servicios de reconstrucción mamaria a mujeres afectadas por el cáncer, según informó el Jefe de Gobierno, Martí Batres, durante una visita a las áreas renovadas del hospital.
En tanto, la secretaria de Salud local, Oliva López, mencionó que este tomógrafo se obtuvo con los 302 mdp del Fonsabi; además, es parte de los ocho que se están instalando de manera paulatina. Dijo que desde el primer momento de esta gestión priorizaron el equipamiento y la mejora de la atención, “pues cuando llegamos teníamos 2 mil 500 equipos dañados”, pero con el cambio al IMSS-Bienestar “tuvimos un apoyo (del gobierno federal) de más de 2 mil mdp para distintas áreas”.
En cuanto a la capacidad operativa del Hospital Rubén Leñero, este realiza anualmente más de 20 mil cirugías de urgencia y más de mil cirugías reconstructivas, demostrando su importancia en el sistema de salud de la ciudad.
Alejandro Ávalos Bracho, coordinador estatal del IMSS-Bienestar Ciudad de México, elogió el progreso en la transición hacia el nuevo sistema nacional de salud, destacando un abastecimiento de medicamentos del 92 al 93 por ciento en clínicas de primer nivel y entre un 82 y 86 por ciento en hospitales.