El joven, de 19 años, vendía las imágenes alteradas de las estudiantes por medio de las redes sociales
En un caso que ha generado indignación social, un juez absolvió a Diego N, exalumno del Instituto Politécnico Nacional (IPN), de los cargos por delitos sexuales cometidos contra varias alumnas de la institución. Las acusaciones señalaban que Diego N. utilizó inteligencia artificial para crear y difundir contenido sexual explícito sin el consentimiento de las víctimas.
El juez Francisco Salazar Silva determinó en una audiencia realizada el 4 de diciembre que no existían pruebas suficientes para acreditar la culpabilidad del acusado, a pesar de que en su iPad se encontraron más de 166 mil 900 fotos y más de 12 mil videos de contenido comprometedor. La decisión ha provocado una fuerte ola de protestas tanto en redes sociales como en el campus del IPN.
Las víctimas y sus familiares manifestaron su descontento con el sistema de justicia, calificando la resolución como una revictimización. A través de un comunicado, denunciaron que el fallo refleja la falta de protección y acceso a la justicia para quienes han sido afectados por delitos sexuales en México.
Por su parte, las representantes legales de las víctimas anunciaron que apelarán la decisión del juez. Tienen un plazo de cinco días para presentar los argumentos necesarios y buscar que el caso sea revisado en instancias superiores.
Aunque Diego N. fue absuelto en este caso específico, aún enfrenta al menos seis investigaciones adicionales relacionadas con delitos sexuales. Debido a ello, permanecerá en prisión mientras se resuelven los procesos pendientes en su contra.
Este caso pone en evidencia la preocupación por el uso de tecnologías como la inteligencia artificial para perpetrar delitos, así como la urgencia de que el sistema judicial se actualice y capacite para enfrentar estos nuevos desafíos. Expertos en derechos digitales y justicia han señalado la necesidad de endurecer las leyes y procedimientos para proteger a las víctimas de este tipo de agresiones.
La absolución de Diego N. es solo uno de los muchos ejemplos de la frustración generalizada ante la impunidad en casos de violencia sexual en el país. La sociedad civil, organizaciones de derechos humanos y autoridades deben redoblar esfuerzos para garantizar que las víctimas reciban justicia y que este tipo de delitos no queden impunes.
La resolución judicial también ha puesto en el centro del debate la importancia de fortalecer las políticas públicas y la sensibilización en torno a la violencia de género y el uso indebido de la tecnología, con el fin de prevenir futuros casos y proteger los derechos de las mujeres en México.