A sus 57 años, Madonna ofrece hoy y mañana dos shows en el D.F. con un imponente despliegue de música, baile y nostalgia.
Que si pide rosas pálidas de seis pulgadas en su camerino, comida vegetariana, 20 líneas telefónicas internacionales, que si la abuchearon en Manchester por salir 50 minutos tarde a su show, que si su hijo la tiene bloqueada en Instagram. Nada está confirmado excepto que Madonna está de gira por el mundo y le conviene muchísimo que se hable de ella en los medios, bien o mal, eso no importa.
La intérprete y bailarina, de 57 años, regresa a la Ciudad de México con el Rebel Heart Tour, que combina elementos de la espectacularidad del Cirque du Solei con un gran intimismo, según lo narrado por quienes ya lo han presenciado.
Madonna viene a promocionar su más reciente disco Rebel Heart que, aunque ha sido bien recibido, no ha logrado el éxito que conseguían los álbumes que sacaba en los 80 y 90. Ahora la competencia es más dura, con estrellas pop femeninas por todos lados (Beyoncé, Katy Perry, Britney, Taylor Swift, Miley Cyrus).
Lo cierto es que ir a un concierto suyo es, sin duda, una experiencia sensorial emocionante; luces por todos lados, visuales y decenas de bailarines experimentados por todo el escenario.
El tema de esta gira es la rebeldía, pero también repasa los éxitos que la convirtieron en la Reina del Pop. Por si no fuera poco, Madonna dará dos shows en México: 6 y 7 de enero en el Palacio de los Deportes.
Además, su concierto es el primero de una ola de presentaciones internacionales que llenarán la ciudad este año; después de ella vienen Los Rolling Stones, Adele, Coldplay, Maroon 5, Iron Maiden y Noel Gallagher.
Rebel Heart Tour en México
6 y 7 de enero, 20 h.
Palacio de los Deportes
De $1082.50 a $6554.
