Desde los primeros días de enero las calles de Talavera, Roldan,Venustiano Carranza y Alhóndiga se invaden de centenares de vendedores dedicados al negocio de accesorios para el llamado Niño Dios.
Cada año, las madrinas (así se le dice a quien le tocó arrullar al niño Dios el 24 de diciembre) llegan a estas calles con sus ahijados entre los brazos y envueltos en sabanas para escogerles la vestimenta para el festejo del 2 de febrero.
Dentro del variado catálogo que ofrecen los más de 5 mil vendedores, encontrarás al Niño Doctor, Santo Papa, Azteca, San Judas y Juan Diego; por mencionar algunos, pero el más solicitado es el del Niño de Atocha y el de las Palomitas, según cuentan los vendedores instalados en estas calles.
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Algunas madrinas refieren que si la vestimenta no es del agrado del ahijado este hace berrinche y en ocasiones no le queda el vestido o los zapatos, por lo que tienen que echar mano de un regaño. Testigos aseguran que después de eso les quedan las prendas.
En esta tradicional romería no solo encontrarás accesorios y vestimentas para los Niños Dios, también hay puestos dedicados a la reparación de estas figuras. Restaurarlos puede costar desde 60 hasta 180 pesos, con ese dinero se podrían comprar otros, aunque es tanto el cariño que le tienen que prefieren repararlo aunque esté hecho pedazos.
“En una ocasión me tocó reparar niños sin cabeza o sin dedos, sale más barato comprarlos nuevos pero las clientas les agarran tanto cariño a sus niñitos que prefieren pagar”, comenta Saúl, quien desde hace cuatro años se dedica a la reparación de los niños y se instala sobre la calle de Roldán y Talavera.
Sobre la calle de Roldán, en improvisados puestos metálicos encontrarás fabricantes de Niños Dios, los hay de todos los tamaños y colores, aquí puedes ver paso a paso cómo le dan forma a estas imágenes hechas con yeso, para posteriormente pintarlos y agregarles detalles como pestañas y hasta cabello.
En caso de que te animes a comprar uno de los niños, los vendedores recomiendan que por tradición la primer prenda con la que debes vestirlo sea con un ropón, tipo bautizo y puede llegar a costar hasta 250 pesos para el modelomás grande, que mide 45 centímetros.
Es común ver en alguna casa de cualquier barrio chilango la leyenda que dice más o menos así: “Se visten niños Dios”, claro que no puede faltar la comadre que quiere quedar bien sin importar el precio lleva a los ahijados a esos lugares, y hay quienes llegan a pagar desde 200 y hasta mil pesos por el cambio de tacuche.
¿Dónde creen ustedes que compran estos artículos? Pues en estas populares calles y es que no solo se dedican a vender menudeo, sino también a la venta por mayoreo. Encuentras sillas, camas, nichos y canastitas que van desde los 20 pesos por pieza y precio especial para los mayoristas.
En la celebración de la candelaria, además de bendecir al Niño Dios, también llevan las candelas o veladoras que representan la luz de Cristo en los hogares, y sobre la calle de talavera encontraras un sinfin de puestos dedicados a la venta de éstas, los precios van desde los 5 pesos para las más sencillas o pequeñas, aunque también están las más elaboradas que tienen un costo de 20 pesos, pero pregunta en varios lugares antes de comprar porque el precio puede variar.
También hay lugares específicos dedicados a la venta de vestidos y accesorios en miniatura, tal es el caso de este negocio que se encuentra a un costado del Templo del Señor de la Humildad, quienes durante todo el año se dedican a la fabricación de este tipo de vestimenta, la cual es elaborada a mano por la señora Martha Rodríguez.
Los tamaños de los niños van desde los 5 centímetros, por mencionar al más pequeño, y 15 centímetros el más grande, dentro de la variedad de vestidos se encuentra el de Niño de los milagros, Niño de Atocha, Divino Maestro, los Arcángeles Miguel, Uriel y el Niño de la Salud.
Dónde: calles Talavera, Venustiano Carranza y Alhóndiga, col Centro Histórico, Cuauhtémoc
(Fotos:Dulce Ahumada)
