20 años sobre los escenarios son motivo suficiente para celebrar la trayectoria de la cantante oaxaqueña, quien se presenta este viernes en El Plaza Condesa.
Susana Harp habla de México, de Oaxaca y de su gente como quien platica de un bello romance. Para ella el modo de expresar el amor por sus raíces se traduce en música, donde los sonidos del país se ven reflejados en cada estrofa o nota a interpretar; asegura que no ha sido un camino fácil, pero sí uno muy sincero y lleno de satisfacciones.
Lista para celebrar sus 20 años de trayectoria, para ella sigue siendo un orgullo representar los sonidos mexicanos, aunque cada uno de sus discos –o historias cantadas, como los llama– significa un nuevo reto que, naturalmente, involucra a especialistas y gente que ve estos géneros como algo propio.
La cantante oaxaqueña se describe mucho más relajada que en sus inicios, siempre metódica y muy entregada a lo que le apasiona. “Ahora vivo de una manera más gozosa, por eso le puse ese título al disco anterior (Misterios gozosos), está la oportunidad de tener certeza, saber que hay alguien a quien le interesa este tipo de trabajo, y me permito ser guiada totalmente por la intuición”, platica de los cambios que la experiencia ha forjado en ella como mujer y artista.
DOS DÉCADAS EN ESCENA
Para el aniversario ha preparado el material 20 años de son, que recopila sus piezas más apreciadas; algo de Xquenda –su primer álbum–, algo de Fandangos de ébano y algunos temas en vivo que nunca llegó a publicar.
El Plaza Condesa, que la recibirá este viernes, es un territorio desconocido para Susana, pero más que preocuparle le emociona. En sus palabras, el show será un festejo donde la primera parte tendrá que ver con fusiones al lado de su extenso grupo de músicos; en la segunda, una banda la acompañará para un concierto tradicional.
LAS BATALLAS
El saberse dentro de lugares poco comunes en la música hace a Susana tener firmes los pies en la tierra, eso deja entrever cuando dice que cada concierto es como su primera salida a la luz para mucha gente. Su vida como artista independiente ha sido complicada pero “ver los rostros de la gente, escuchar sus historias, involucrarme de una manera totalmente diferente, es cambiar unas por otras”, cuenta. Para ella la parte humana de su carrera es la clave para que los proyectos tengan el toque de magia y satisfacción necesario.
Los prejuicios que juzgan sus pocos rasgos oaxaqueños o su conexión familiar con Alfredo Harp también han servido como un incentivo para que la cantante continúe siendo sincera con ella misma, el público y lo que ofrece con su trabajo —que define más como una oportunidad de vida y un lujo—; hablando de congruencia y fidelidad a lo que la pasión quiere hacer, “es la única manera en que vas a entregar algo que valga la pena”, dice con la sonrisa de quien se sabe en el lugar indicado.
“LA BRÚJULA DE HACER EXACTAMENTE LO QUE MÁS ME APASIONA, ES LA ÚNICA QUE YO CONOZCO” -Susana Harp
GOZA ESE SON
El Plaza Condesa
Juan Escutia 4, col. Condesa.
Viernes 13 de mayo, 21 h.
De $460 a $860.