Entre la obra de Bernardo Esquinca destacan los libros de cuento Demonia y Mar negro, y las novelas Toda la sangre y Carne de ataúd, por las que ha sido reconocido como uno de los principales exponentes de la literatura fantástica y policíaca de la actualidad en el país
Para chacharear
El tianguis de La Lagunilla
López Rayón 46 lote 1, esquina con Ignacio Allende, col. Centro
“Es un lugar lleno de vida, donde puedes hacer muchas cosas y pasar un domingo chachareando. Encuentras una gran cantidad de ropa y todo lo que venden ahí es alucinante, desde muñecas viejas, muebles antiguos, anuncios y revistas. También se puede comer muy bien, hay una excelente cochinita pibil y te puedes tomar una cerveza”.
Para sorprenderse
Catacumbas de la Catedral
Plaza de la Constitución, col. Centro
“Se trata de un paseo al que no se accede normalmente, pero si se junta un grupo grande y se contacta a los responsables, uno puede entrar a las catacumbas. Literalmente es el inframundo de la ciudad, ya que abajo de la Catedral hay una pirámide que puede verse durante el paseo. Se baja por túneles muy misteriosos hasta llegar a las criptas”.
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Para comer
El Pozole de Moctezuma
Moctezuma 12, planta baja, col. Guerrero
“Este pozole se encuentra en Garibaldi (en las inmediaciones de la plaza). Cuando lo encuentres, te darás cuenta que ni siquiera tiene letrero. Para entrar solo necesitas tocar el timbre y podrás bajar a un restaurante espléndido en el que te dan un pozole que se bautiza con mezcal. Es uno de los pozoles más ricos que he comido en mi vida”.
Para curarse la cruda
Los Tres Reyes
Pablo Verones 12, col. Alfonso XIII
“Un lugar que recomiendo muchísimo. Está en Mixcoac y vende una de las mejores barbacoas para crudos que se puede encontrar en la ciudad. Se llama Los Tres Reyes y allí también puedes probar un caldo delicioso. Me arriesgo a decir que venden la mejor carne de la zona. También te puedes tomar una cerveza. Uno revive en ese lugar”.
Fotos: Cortesía/ Cuartoscuro/ Especiales