Según las creencias católicas y el calendario de la SEP, estos días son para “guardar”, pero si a ti sólo te con- vence la idea del descanso y la fiesta, sobre todo esta última, pues aquí te decimos dónde seguirla y sin reparo
Al Norte
BANQUETERO, ÚNETE FÉLIX ÁLVARO OBREGÓN 64, COL. ROMA NORTE. De martes a sábado este bar cantina se encuentra a la disposición de los de carrera larga. Para el bajón una cerveza o un mezcal, y mejor si están acompañados de una minihamburguesa, es la opción para volver a la vida. Si no alcanzas lugar, no te preocupes, la banqueta también cuenta como parte del establecimiento.
Al Este
EL DE MODA QUE NO FALLA BARBA AZUL GUTIÉRREZ NÁJERA 291, COL. OBRERA. Este bar rústico con tintes de cabaret está muy de moda y con razón, pero que esté lleno no impide que termine la diversión. El Barba Azul es un lugar ideal para seguirla tranquilo y sin gastar tanto. Y ya si andas muy entonado, quizá hasta te animes a echarte un palomazo. Está abierto de martes a sábado.
Al Centro
PARA TODOS EL JACALITO MEDELLÍN 143, COL. ROMA NORTE. Hipsters, fresas, hippies, aquí hay acceso para toda clase de personas. Un lugar bizarro y considerado a simple vista como un antro de mala muerte, sus instalaciones son pequeñas pero no es impedimento para vivir su after, la cerveza es barata y la música complace.
Al Oeste
EL ELECTRÓNICO RAGGA AV. EJÉRCITO NACIONAL 843, COL. GRANADA. Para los que quieren más fiesta con ambiente y mucho baile, este establecimiento ofrece la música electrónica del momento y la acompaña de una variedad de cocteles bien servidos, por si entras en calor y te da “la sed”. Si quieres llegar y pasarla bien en serio, intenta no ir tan tarde pues el lugar a veces se encuentra a reventar y los apretones no son lo más recomendable, menos si ya vienes entonado de otra fiesta. Así que agarra a tu pareja y a sacarle brillo al piso.
Al Sur
XQUISITO, MI REY SENS PASEO DE LOS TAMARINDOS 90, COL. BOSQUES DE LAS LOMAS. También conocido como “el lugar de los Mirreyes”, el Sens es el típico club nocturno donde la fiesta parece nunca terminar; la entrada es el único obstáculo, pues es un caos, aunque una vez adentro el menú de bebidas vale la pena la espera. El plus de este lugar es su diseño, el techo y el piso iluminados con luces neón que hacen que las camisas abiertas hasta el ombligo y los mocasines sin calcetín luzcan bien.