Aprovecha el primer puente del año para conocer estos lugares de México y que no están tan lejos de la ciudad. En todos hay agua, ya sea cascadas o lagunas, y casas históricas. Son muy tranquilos, por lo que son perfectos para escapar del frío y el estrés de CDMX. Arma el plan con tus amigos o lánzate tú solo. No importa la opción que escojas, seguro te divertirás
Huasteca potosina
Sin duda, se trata de un lugar que combina naturaleza, tranquilidad y cultura. Puedes armar un recorrido por varios municipios de la Huasteca: Puente de Dios y las cascadas de Tamasopo, de un color azul limpio y donde puedes nadar —aprovecha también para desayunar con los lugareños—; el jardín surrealista de Edward James, en Xilitla, uno de los pueblos mágicos más populares de nuestro país; por la mañana, visita el Sótano de las golondrinas, un verdadero espectáculo natural, y pasea en lancha en la cascada de Tamul, que es las más grande de San Luis Potosí.
Zacatlán, Puebla
Este municipio poblano es uno de los más bonitos de México. Es famoso porque aquí se hace sidra, pero también porque está rodeado de barrancas y de hermosos paisajes. Además de visitar los lugares turísticos, como la fábrica Centenario, lánzate a los espacios naturales, como el mirador conocido como el Balcón del Diablo, desde donde se puede ver el río Zempoala y que se encuentra cerca de la cascada de San Pedro; ahí puedes acampar y también hay sitios para comer. Otra parada obligada es el Museo de Relojería Alberto Olvera Hernández ubicado a un par de cuadras del Reloj Floral.
El oro, Edomex
Este pueblo mágico fue muy conocido por la gran cantidad de minas que funcionaron ahí después de su fundación, en el siglo XVIII. Como ejemplo de lo cosmopolita que fue en su tiempo, puedes ver lugares como el Teatro Juárez, el palacio municipal, así como la estación de tren que fue inaugurada en 1889. Como otras iglesias del país, la capilla de este lugar tiene incrustaciones de oro. Y para vivir la experiencia ecoturística, visita la presa Brockman que está rodeada de pinos y además tiene un puente de madera que te puede recordar a una película de Wes Anderson.
¿Cómo llegar?
A cualquiera de los tres lugares puedes llegar en camión, pero ir en automóvil puede ser una mejor opción. Para llegar a la Huasteca potosina, es un trayecto de aproximadamente ocho horas; para llegar a Zacatlán, son dos horas, cuarenta y cinco minutos, al igual que el camino para El Oro.
Más información: www.visitmexico.com
También te puede interesar: Aquí vivió Benita Galeana