Fotografía: Cortesía
Más allá de los animes clásicos de las infancia como Sailor Moon, Detective Conan o Pokemon… Hasta hace poco no era una gran conocedora de este gran formato. Empecé fuerte, eso sí, primero con Naruto y después con Shippuden y de ahí me enganché y ya no pude salir. Hasta tal punto que ahora hasta veo animes sobre fútbol (Blue Lock) aunque odie el deporte en la vida real.
Por esto mismo sé lo que es estar un poco perdido en este mundo, ya que hay tantos géneros y subgéneros de anime como de otakus. Yo soy más de shonen o de seinen, ¿pero qué eso exactamente os preguntaréis? Pues aquí abajo os lo cuento.
Shonen
Cuando alguien piensa en anime, lo más seguro es que lo primero que se le venga a la mente es un anime: “Dragon Ball”, “My Hero Academia”, “One Piece”… Y esto es porque, por lo general, son el género más popular. Y aunque literal shonen signifique niño (masculino), a mí me encanta y no soy hombre ni pequeña. Sin embargo, se nombra de esta manera ya que es el público en el que los creadores piensan al escribirlos/producirlos.
Dentro de este género hay muchas temáticas: deportes, ciencia, fantasía, acción, superhéroes…
Shoujo
Es el equivalente femenino del shonen, es decir, lo que creen la gente que las chicas jóvenes quieren ver, y no digo que no, pero desde un punto de vista más actual creo que los tiempos han cambiado un poco, ¿no creen? De todos modos, en este tipo de animes lo que más vamos a encontrar son romances tiernos, algo de drama… y en ocasiones hay algo de acción. Al final del día Sailor Moon es un Shoujo, pero en vez de cortar cabezas con una espada al estilo Tanjiro lanzan hechizos bonitos con su batones.
Seinen
Siguiendo la misma estela que los géneros anteriores, éste también define el tipo de público al que va dirigido: hombres jóvenes. En este caso, encontraremos historias similares a las de los shonen, pero con más violencia, un humor más negro, e incluso, contenido sexual. Estoy hablando de animes como Ghost in a Shell, una de las novedades de esta temporada 2023 Tengoku Daimakyo o uno de los animes que más me gustan: Darker than Black.
Josei
Habéis adivinado! Es la contraparte del seinen, y en algunas ocasiones definido como: para aquellas mujeres que quieren aventuras más allá de los colegios/prepas. Josei es donde encontrarás relaciones examinadas más allá del beso inicial, vidas después de la graduación, y mucha más acción entre las sábanas. Algunos ejemplos son “Paradise Kiss”, “Nodame Cantabile” o “Love Stage!”.
Ecchi
Ahora pasemos a aquellos que no son géneros tan populares, y no digo los animes, sino que es más difícil que alguien que no está tan acostumbrado a este mundo sepa o le suene este nombre.
En este caso ecchi se refiere a algo sexy, travieso, y sí, hace referencia al sexo. Aunque esto no quiere decir tengan escenas sexuales explícitas, o que el sexo sea el todo de la trama. Hay muchos animes ecchi que encantan por lo rico de su universo o lo profundo de sus historias. ¡Ah! Y no olvidemos que también hay algunos que tienen una gran carga de humor como “Ebichu”. “Kill la Kill”, “High School of the Dead”, “Zero no Tsukaima” y “Rosario to Vampire”, son de los más conocidos.
Harem
¿Por qué conformarnos con una historia en la que el protagonista solo tenga un interés amoroso, por qué no con seis o siete? Pues lo dicho, en este caso el protagonista es el centro de interés de un grupo de chicas (“Nisekoi”, “High School DxD”) o, en el caso de reverse harem, la protagonista femenina lo es de un grupo de chicos (“Ouran High School Host Club.”). Y aunque por lo general son romances, ya existen varios animes harem que introducen otras temáticas como “Tenchi Muyo” que transcurre en el espacio o “Trinity Seven” en cuyo universo fantástico se desarrollan grandes conspiraciones.
Isekai
En este caso los animes siempre tienen la misma premisa: el protagonista vive en el mundo “real” y de una manera u otra termina viajando a un mundo diferente en el que vive diversas aventuras. “No Game No Life”, “That Time I Got Reincarnated as a Slime”, “Re: Zero” son de los más populares.
Mecha
¿Hay algo que grite “anime” más que robots gigantes? No, ¿verdad? Obras tempranas como “Mazinger Z” y “Giant Robo” sentaron las bases para otras sagas como la de “Patlabor” o “Full Metal Panic!”.
Sin embargo, hay que hacer una distinción importante. Dentro de mecha como género, hay historias de “súper robots”, es decir, enormes robots humanoides con poderes increíbles, e historias de “robots reales”, que se apegan más cerca de las limitaciones de nuestro mundo. Algunas series mezclan las dos, como “Neon Genesis Evangelion”.
Slice of Live
Todo está en el nombre: un trozo de vida. Este es un género que contiene historias que observan la vida cotidiana de un individuo o grupo de personajes. Es un anime que se vanagloria en los detalles de eventos tan sencillos o íntimos como una comida o una ceremonia escolar. Nadie se volverá Super Sayayin o se transformará en titán al hacerse daño, aquí todo es normal.
Pero no por ello es un género aburrido, ya que suele tratar temas interesantes como por ejemplo, la vida en una prepa dedicada a la música como en “K-On” o “Aria: The Animation” que incluye fenómenos sobrenaturales como dragones, viajes en el tiempo, e incluso, visitas a otros planetas.
Kodomomuke
Este es el género que realmente es para niños pequeños. Es decir, para todos aquellos que piensan que el anime al ser dibujos es solo para niños, podemos darles la razón en este género. Entiendo la confusión, muchos de ellos han formado parte de la infancia de la mayoría de mi generación (niños de los 80´s – 90´s) como “Doraemon”, “Pokemon” o “Anpanman”.
Iyashikei
Iyashikei, que significa “curar”, y el género en sí es un poco difícil de describir. A menudo se superpone con otros géneros, especialmente con “Slices of Live”, y está más definido por la experiencia de verlo que por el contenido real de la historia. En pocas palabras, es el anime que te calma mientras lo ves. Fondos magníficamente pintados, escenas suaves de la naturaleza, gente trabajando juntos hacia una meta mayoer. ¡Vamos! El equivalente en anime a darte un largo baño caliente después de un día duro. Algunos de los más recomendados son: “Mushishi”, “Laid-Back Camp”, “Non Non Biyori” o “Encouragement of climb”.
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