Platicamos con Josué Ibáñez, director del Festival OFFF, y nos cuenta cómo el proyecto ha ido de “patadas de inspiración” a
“bofetadas de atrevimiento”.
¿Cómo fue el proceso de decidir traer OFFF a México?
Yo viví unos años en Barcelona, y ahí conocí OFFF. Desde que participé como asistente mi meta era estar del otro lado del escenario y, a partir de ese momento, recuerdo nunca faltar cada año a esa cita con el festival. Hoy es un poco diferente mi papel a como lo imaginé en ese entonces. Me gusta que las personas vivían la misma experiencia que tuve cuando conocí OFFF: la de creer que puedes inspirar a otros. Un amigo muy cercano me presentó a Héctor Ayuso, el fundador de OFFF Barcelona; la conexión fue instantánea, y junto con mi socio y amigo Alejandro Machorro, así como con todo el equipo de COCOLAB, simplemente nos atrevimos.
Esta es la cuarta edición Mx, ¿qué tipo de público ha cautivado el festival y qué tipo de público quiere formar?
A lo largo de estos años nos hemos dado cuenta de que el público se ha diversificando, y como es un festival único en su tipo, atrae a nuevos visitantes. Ahora vemos gente de países como Estados Unidos, Canadá, Guatemala, Costa Rica y Colombia, esto nos habla de la necesidad e importancia de eventos como OFFF en esta parte del continente. Lo que ha definido a OFFF MX es la meticulosa curaduría que balancea la creatividad, el diseño y el arte digital.
¿Qué ofrece el festival este año? y ¿qué aporta en específico al panorama de las artes y el diseño de la Ciudad de México?
Como nosotros lo vemos, en México hay muchos baches pero por cada bache que te encuentras hay una oportunidad. Nuestro país tiene una autenticidad tremenda, que por estar inmersos en ella a veces se nos olvida, y es aquí donde el festival encuentra las condiciones perfectas para poder detonar aún más esa creatividad y autenticidad. OFFF apuesta por los que se atreven a hacer, aquellos que pasan por encima de la situación que vive nuestro país y hacen proyectos tan radicales que cambian la manera de ver las cosas.
OFFF ofrece todos sus años un derrame de conocimiento que puede ser aplicado a las artes y el diseño en sus diversas manifestaciones, tanto plásticas como digitales, es la combinación perfecta de momento y lugar.
Como director del proyecto, ¿cuál es tu ideal de festival?, ¿crees que lo has conseguido o qué te hace falta, en términos de lo que se ofrece a los asistentes?
OFFF es una plataforma y creemos que como tal debería evolucionar a un formato que permita la participación de más personas, y que el día de mañana los nuevos conferencistas lo integren aaquellos que fueron espectadores. OFFF tiene el potencial de ser un festival que no sólo vive en D.F., sino en distintas partes del país.
¿Qué le dirías a alguien que no conoce el festival y que tuvieras que cautivar, con una o dos frases, para que se interesara en éste?
Que OFFF es una patada de inspiración y una bofetada para atreverte a hacer cosas, tenemos muchas ideas en nuestra cabeza pero sólo unas cuantas salen de nuestras bocas. OFFF representa la oportunidad y pretexto perfecto para sacar esas ideas.
Sus imperdibles para esta edición:
- Casey Neistat (Estados Unidos), por su irreverencia y su creatividad de ver las cosas a través de videos hechos para internet.
Conferencia el 26 de septiembre.
2. Abstract Birds (Italia/Estados Unidos), por la increíble manipulación del código y llevarlo a un performance audiovisual único.
Conferencia 26 de septiembre.
3. Lóbulo (España), porque nos demuestra que lo análogo, como el papel, puede ser llevado a su más alta expresión.
Conferencia 26 septiembre.
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