Seguramente recuerdas tu primera visita de niño al Papalote, el museo interactivo que permite “Tocar, jugar y aprender”. La cama de clavos, la Megapantalla Imax, las burbujas gigantes o el Árbol Ramón son sólo algunas de las atracciones que impresionaron a decenas de generaciones desde 1993.
Este lunes, el recinto reabre sus puertas con una renovación que consistió en tres pilares: la infraestructura, sustentabilidad y sus contenidos. “El nuevo Papalote cuenta una historia diferente, maneja una narrativa muy bonita, que parte desde la idea y el hecho de que como personas somos parte de un universo y de una comunidad muy muy grande”, explica Rubén Piza, director comercial del recinto.
La remodelación requirió cambiar entre el 95 y 99% de las atracciones, pero ¡tranquilo!, porque aún encontrarás las más emblemáticas. En tu siguiente visita viajarás por cuatro áreas, en un recorrido que puede durar de cinco a ocho horas y que se distribuye de la siguiente manera:
MI CUERPO
Conocerás cómo funcionan tus órganos, sentidos, el cerebro y hasta podrás sentir la textura de un intestino y entrar hasta el estómago. Dentro de un cráneo gigante verás cómo funcionan tus ojos y tocarás una lengua.
MÉXICO VIVO
Es una de las zonas más grandes y se encuentra al aire libre, ahí aprenderás sobre los ecosistemas que hay en el Valle de México, la importancia de zonas como Xochimilco y podrás sembrar en una chinampa.
MI FAMILIA
Te enseñarán por qué eres como eres, con pelo lacio, chino; verás cómo vestían tus papás cuando eran pequeños y hasta qué tipo de música escuchaban.
MI CIUDAD
Dentro de esta exhibición encontrarás el Elevador, un simulador que te lleva desde lo más profundo de la ciudad, como sus fósiles, sitios arqueológicos y las tuberías, hasta llegar a lo más alto con una panorámica de toda la urbe.
LABORATORIO DE IDEAS
Los niños y visitantes harán realidad aquello que su imaginación les dicta, podrán construir desde un robot hasta cohetes que funcionen, cocinar y entender como se construyen objetos como una máscara o un carro. Habrá además un laberinto enorme y una resbaladilla de 40 metros
Los precios de la entrada aumentaron un poquito, pero vale la pena conocer esta nueva etapa. El boleto cuesta 199, pero hay un paquete familiar para cuatro personas en 849 pesos.