Ese personaje dark, cuyas letras hablan sobre la diabetes o el ser un vago, se presenta hoy en el Imperial.
El Muertho de TJ es un hombre que asegura haber sido un mediocre que iba a los tianguis de Tijuana con una grabadora a presentar sus canciones, hasta que uno de sus videos se hizo viral y ahora es una especie de celebridad en el mundillo cool de la música alternativa.
A través de una charla telefónica, Balthazar Hernández, su verdadero nombre, confiesa que por primera vez en su vida siente que su autoestima está bien, se dice valorado por la gente y sus fanáticos y muy contento por el éxito que ha logrado. Afirma que es lo único que ha cambiado de su vida ahora que es famoso, pues sigue sin ver resultados económicos.
Sus canciones son una mezcla de electropop con letras que reflejan su cotidianidad: “Traigo el azúcar bien arriba, es que comí unas golosinas, también tomé una coca fría y unos gansitos, ¡qué delicia!” o “Antes tenía un carro que estaba bien parado, tenía un buen trabajo, mi esposa y dos muchachos, pero me hice malo, se me metió el diablo. Todo eso lo he dejado, ahora ando de vago, parezco un malandro”.
Balthazar muestra disposición para hablar de cualquier tema: de su rechazo a la Iglesia católica, su adicción al sexo y de que no tiene pareja debido a que la mujer con la que salía no aguantó su nuevo ritmo de vida. También asegura que los músicos famosos le envidian que tenga más éxito que ellos, pese a que él no tiene una guitarra costosa ni un estilo musical definido. Sin embargo, el único tema del que el Muertho no conversa es de su edad; se limita a decir que “estamos chupando tranquilos”.
Un hombre que nunca se despoja del personaje de atuendo gótico.
Seguidor de los Bee Gees y Lady Gaga, el Muertho se presenta hoy en el Imperial a las 22 h, donde interpretará los temas de su disco, Padre Santo.
El Imperial. Álvaro Obregón 293, col. Roma. Boletos: $100. 22 h.
