La colonia Federal es única en su tipo, no sólo por pertenecer a una de las delegaciones más jóvenes de la capital, sino por su peculiar trazado y atractivos.
Caminar por las calles de esta colonia significa escuchar el ir y venir de enormes aviones a cada paso que das. Para los que no vivimos ahí nos parece algo sorprendente y hasta se disfruta ver parte del aterrizaje de estos artefactos voladores, mientras que para los vecinos se ha convertido en algo habitual.
La colonia Federal pertenece a la Venustiano Carranza, delegación que tuvo su origen en 1971. Según se cuenta entre los vecinos, esta colonia se construyó con el fin de que los trabajadores de gobierno vivieran ahí, pero nunca se pudo concretar el proyecto.
Lo que sí quedó establecido fue el nombre de las calles, pues cada una corresponde a una dependencia de gobierno distinta. Así tenemos la calle Educación Pública, Relaciones Exteriores, Guerra y Marina y hasta la Comisión Nacional Agraria.
Una de sus principales características es la forma en que está construida. Prácticamente todas las calles llevan al mismo punto e incluso se ve en forma de telaraña. Además de eso (y del hecho que esté junto al Aeropuerto Internacional de la Ciudad de México), la colonia Federal tiene muchos encantos y aquí te mostramos algunos.
En el centro de todo
Todas las calles de la colonia llevan al mismo punto: la Plaza del Ejecutivo. Además de ser prácticamente el centro de la Federal, alberga el centro cultural de la demarcación. Su nombre es Poliforum Cultural Carranza y en sus instalaciones se presentan todo tipo de actividades artísticas, así como talleres y clases de danza, ballet, teatro y mucho más.
Del otro extremo del lugar se encuentra un pequeño parque equipado con una cancha de futbol rápido y un área infantil llena de juegos. A pesar de ser pequeño, es el sitio ideal para que los vecinos paseen con sus mascotas.
A los alrededores de la Glorieta se encuentra una gran cantidad de negocios de comida en los que puedes disfrutar barbacoa, pancita, tacos y hasta hamburguesas. Además se encuentra la Parroquia de Nuestra Señora del Sagrado Corazón que es tan chiquita como la colonia.
Escuelas de aviación
A escasas cuadras del Aeropuerto existen cuatro escuelas de aviación. La primera es la Escuela de Aviación México, ubicada en la calle Procuraduría General de Justicia 207. Fue fundada en 1943 y cuenta con simuladores, cursos y carreras para piloto aviador privado o de línea aérea, piloto aviador de helicóptero, sobrecargo de aviación, entre otros.
Por otra parte tenemos a la Escuela de Vuelo Vitar, que inició sus actividades académicas en 1974. Sus profesores son especialistas en aviones que cuentan con más de 10 mil horas de vuelo cada uno. Las instalaciones están ubicadas en el límite de la colonia, justo en el número 362 de la calle Bellas Artes.
También está la Escuela de Vuelo Aeropacífico A. C., situada en Fuerza Aérea Mexicana 380. Al igual que las anteriores, cuenta con cursos y carreras para todo lo referente a la aviación. Además, en la calle de Correso y telégrafos está una institución más llamada PRAAT escuela de vuelo, que es la más joven de todas, pues fue fundada en 2004.
Obviamente en cada una todo se desarrolla diferente, así que no pierdas la oportunidad de echarle un ojo a los planes de estudio de cada una.
Aerotortas
Muchos son los comercios de comida que se encuentran alrededor del centro de la colonia, sin embargo, para probar las mejores tortas del lugar hay que trasladarse a Procuraduría General de Justicia 233. Aquí las tortas están muy bien servidas y hay para todos los gustos. Además sirven unas monumentales flautas que, además de la carne que llevan adentro, le sirven otra generosa porción arriba junto con el queso y la crema.
Ahora que si quieres continuar dándole gusto a la gula, puedes lanzarte a Relaciones Exteriores 48, en donde hay una cafetería con el nombre de esta pecado capital. El sitio ofrece crepas, hot cakes y diversos postres, por lo que es el lugar ideal para endulzar tu día.
(Fotos: Karla Almaraz, cortesía y google maps)