No me gusta ir a Santa Fe. Es muy complicado, pero para conocer una hamburguesa, hago el trayecto con mucho gusto. Encontré un lugar que el mundo godín recomendaba mucho, además de que ellos mismos decían tener las mejores hamburguesas gourmet de México. No podía dejar pasar la oportunidad de conocer The Hamburger Club. Menú en mano, directamente pedí la One and Only: 200 gramos de carne, queso americano, lechuga, cebolla morada, tocino y pepinillos. Sonaba bien, generosa, acompañada de papas a la francesa.
Llegó y se veía y olía muy bien. Bollo propio de muy buen tamaño, quizás un poco seco. El tocino se veía suficiente: ni mucho ni poco. Primera mordida y… bien. Carne jugosa y muy bien amalgamada. Muy bien de término, interactuando perfecto con los complementos. Pero a la segunda mordida el “bien” se mantuvo. Como que se ve muy bien, pero finalmente medio que se queda corta. No quiero decir que esté mal ni nada, pero me pareció bien a secas. Como que, aunque tenía todos los elementos necesarios para ser una gran hamburguesa, se quedó corta de sabor. A veces pasa. Pensé que sería simplemente que me tocó una burger sosona, pero no. Probé la de mi acompañante (una Jacques the Ripper, rellena de queso y con aro de cebolla adentro) y fue lo mismo.
Quizás es como una alegoría del barrio: ese Santa Fe donde todo pareciera escenografía y no hay mucha alma detrás de las construcciones. Ese espíritu de que todo se vea bonito, pero sea muy poco funcional. No sé, quizás me clavo en consideraciones innecesarias. La cosa es que me gustó, pero no me gustó.
FB: thehamburgerclub
Dirección:
Javier Barros Sierra 540, col. Lomas de Santa Fe, del. Álvaro Obregón
Horarios:
Mar a sáb: 13 a 0 h; dom y lun: 13 a 22 h
Consumo promedio por persona:
$300