Esta obra del arquitecto Gonzalo Fonseca fue creada para los juegos olímpicos de México, en 1968. Ahora forma parte de la Ruta de la Amistad y, de las 19 piezas escultóricas que tiene, es la única que es habitable.
La encuentras a la mitad del periférico y Zacatépetl. Conceptualmente es una representación simbólica de Uruguay, el país natal del escultor. La estructura tiene una estética minimalista y su interior está ocupado por elementos geométricos que hacen referencia a los muebles de un hogar. Fue restaurada en 1966 y desde entonces funciona como laboratorio experimental de arte contemporáneo.