Las listas de lectura, año tras año, son uno de los ejercicios más arbitrarios dentro del caprichoso universo taxonómico que suele campar en los últimos suspiros de cada año. Más que algo así como “los mejores libros del año”, lo que se presenta a continuación es una cartografía personal que recoge los libros más destacados en diversos géneros que pasaron por mis manos. Al ser editor de una casa editorial (Sexto Piso) no puedo incluir los libros de este sello en la selección, pero tampoco puedo obviar la cercanía que tengo con los títulos del sello en el que trabajo. Así que he decidido dejar, como pequeña cota al margen, una pequeña recomendación de nuestro catálogo, para evitar la tentación de la autocensura o el autoelogio. Aquí van pues, los libros que me parecieron más valiosos en este año que nos deja.
NARRATIVA MEXICANA
Conjunto vacío, Verónica Gerber, Almadía.
Be y pies, Gabriel Wolfson, Tumbona Ediciones.
Las tierras arrasadas, Emiliano Monge,
Mondadori.
Óptica sanguínea, Daniela Bojórquez, Tumbona Ediciones.
Palabras mayores, Vv. Aa., Malpaso Ediciones.
El año pasado un jurado compuesto por los escritores Guadalupe Nettel, Cristina Rivera Garza y Juan Villoro eligió a 20 escritores mexicanos menores de 40 años para conformar una antología que representara la diversidad y el talento que caracterizan la narrativa contemporánea en nuestro país. Esta antología recoge un texto de cada uno de los seleccionados y confirma el especial momento por el que pasa la literatura mexicana que, quizá como respuesta al derrumbe social que atraviesa, ha fincado, no sólo en la literatura sino en las artes en general, una forma de responder a la perplejidad del presente, una manera de guarecerse del oprobio e incrustar en la memoria de nuestro tiempo algo más que el horror cotidiano.
Sexto Piso recomienda: Recordar a los difuntos, Arnoldo Kraus.
NARRATIVA INTERNACIONAL
No puedo ni quiero, Lydia Davis, Eterna Cadencia.
Ornamento, Juan Cárdenas, Periférica.
Esa visible oscuridad, William Styron, Hueders.
El levante, Mircea Cartarescu, Impedimenta.
La ley del menor, Ian McEwan, Anagrama.
Los viernes en Enrico’s, Don Carpenter, terminado por Jonathan Lethem.
Dice el escritor norteamericano Jonathan Lethem en el epílogo de este libro —en el que explica su relación con Carpenter y la manera en la que terminó este libro póstumo—: “Su prosa es siempre efectiva, y siempre cumple un propósito. Imprime una huella reconocible a su paso, y la frase se dirige hacia su meta siguiendo esas huellas. Tiene un destino, y modestia, y gracia. Tiene un objetivo limpio y claro cada vez que empieza. Nunca malgasta aliento, nunca alardea de su prosa”. Esta historia comienza en la iniciación adolescente de un grupo de jóvenes que quieren ser artistas y culmina con el desenlace en la madurez que muestra el carácter y el destino de las intenciones de cada uno. Un verdadero tour de force al interior del enigmático mundo de la creación artística (literaria específicamente) y un increíble viaje a la norteamérica postbeat.
CRÓNICA/MEMORIAS
La guerra no tiene rostro de mujer, Svetlana Alexiévich.
Slim. Biografía política del hombre más rico del mundo, Diego Enrique Osorno, Debate.
Who I Am, Pete Townshend, Malpaso Ediciones. Freud, en su tiempo y en el nuestro, Élisabeth Roudinesco, Debate.
En movimiento, una vida, Oliver Sacks, Anagrama.
Oliver Sacks consiguió, a lo largo de su prolífica obra, iluminar la existencia como un terreno en el que cada mente supone la posibilidad de habitar el mundo de una manera distinta. A través de los casos clínicos de sus pacientes y otras personas cercanas (incluido él mismo), Sacks abrió un universo en el que lo anormal no es una deficiencia sino la entrada a una dimensión vital distinta. Esta vocación por explorar los márgenes, por deshacer los límites y llevar la existencia hasta sus últimas consecuencias está magistral y entrañablemente plasmada en esta biografía destinada a convertirse en un clásico de nuestro tiempo. Sea a bordo de una motocicleta, tras la lente de un microscopio o en un estudio rodeado de libros, la vida de Sacks rezuma un apasionante amor por la vida con todo y sus dificultades, dolores y complejidades.
Sexto Piso recomienda: Crónicas de un país que ya no existe. Libia de Gadafi al colapso, Jon Lee Anderson.
ENSAYO.
Semper dolens: Historia del suicidio en Occidente, Ramón Andrés, Acantilado.
Genómica, Pablo Meyer, Tusquets Ediciones.
La filosofía de la generación beat y otros escritos, Jack Kerouac, Caja Negra.
Eros. El dulce-amargo, Anne Carson, Fiordo.
Salvar las apariencias, Owen Barfield, Atalanta.
La vocación por erigir la razón, el conocimiento científico y la ilusión del progreso como estandartes de nuestro tiempo ha tenido como una de sus consecuencias más definitivas la evolución de una conciencia humana que nos ha llevado a entender el mundo de una manera más fría, más desencantada. Extirpados del mundo, por encima de los fenómenos, creyentes ególatras de que la naturaleza es algo ajeno a nosotros y que además se puede dominar, hemos renunciado a participar en un mundo cuyos fenómenos son diseccionados sólo a través de la conciencia. Como si el universo fuera una ecuación cuyas variables un día serán totalmente reveladas.
Una verdadera obra maestra, publicada en su tiempo por T. S. Eliot, que nos llama a combatir las fuerzas inerciales de nuestra contemporaneidad para atrever a mirarnos como parte del mundo que nos rodea.
Sexto Piso recomienda: El alma de las marionetas. Un breve estudio sobre la libertad del ser humano, John Gray.
LIBRO ILUSTRADO
Aquí, Richard McGuire, Salamandra Graphics.
Las meninas, Santiago García, Astiberri.
El friso de la vida, Edvard Munch, Nórdica Libros.
Funerales preventivos, Juan Villoro y Rogelio Naranjo, Almadía.
Crímenes ejemplares, Max Aub, ilustrado por Liniers, Libros del Zorro Rojo.
“Lo maté sin darme cuenta. No creo que fuera la primera vez”. “De mí no se ríe nadie. Por lo menos ese ya no”. “En todo suicidio hay un asesino que nunca es el suicida. Otro otro”. Además de estos breves relatos aforísticos, el libro de Aub incluye estudios epigramáticos sobre el suicidio, crímenes de un peluquero que le corta el cuello a su cliente porque tiene un grano y los granos lo ponen nervioso, un aficionado a la tauromaquia que aventó al ruedo al acomodador por darle un lugar equivocado y una mujer que arrolla a un policía de tránsito porque la detuvo sin razón.
La muerte como consecuencia del absurdo de la vida. Max Aub, el escritor nacido en París que emigrara a Valencia durante la Primera Guerra Mundial, que huyera a Argelia durante la Guerra Civil española, que pasara 30 años en México, donde murió a los 69 años de edad, ilustrado por Liniers en este libro delirante, divertido y conmovedor.
Sexto Piso recomienda: Che Guevara. Una vida revolucionaria, Jon Lee Anderson y José Hernández .
LIBRO INFANTIL
Océano, Anouck Boisrobert y Louis Rigaud, Petra Ediciones.
Animalium, Pep Amengual, Impedimenta.
Kitsu y el baku, Elizabeth Cruz Madrid y Silvana Ávila, Ediciones El Naranjo.
El libro del cementerio, Neil Gaiman, Roca Ediciones.
Amor, Gian Berto Vanni, Hueders.
Este libro es una verdadera obra de arte en sí mismo. Desde la primera página, el libro abre en cada página una posibilidad de lectura distinta en la que recortes, pestañas, agujeros y diversos recovecos hechos ingeniosamente en las páginas hacen de la experiencia de lectura un viaje singular. La historia de Amor nos cuenta la vida de una niña huérfana abandonada por sus padres cuando tiene nueve años. La reconciliación llega de forma abrupta y extraña. El tránsito hacia el desenlace es tan cautivador y el punto de llegada tan acogedor que los pequeños lectores podrán sumergirse en este hermoso laberinto una y otra vez sin temor a extraviarse en él.
Sexto Piso recomienda: En busca de Kayla, Lydia Cacho y Patricio Betteo.
TEMA DEL AÑO: CAMINAR
En el maravilloso Wanderlost, la escritora nacida en San Francisco Rebecca Solnit explica las razones por las que se adentró en la maravillosa epopeya de realizar una investigación sobre caminar que nos lleva a ciudades como París, Las Vegas o Londres, a caminatas de mujeres más allá de la medianoche, a clubes de caminantes y, sobre todo, a una lúcida reflexión sobre la relación entre mente-cuerpo-espacio público. Dice Solnit: “Al caminar, la mente y el cuerpo pueden trabajar en conjunto, de modo que el pensamiento se vuelve un acto casi físico, rítmico […] Tanto la espiritualidad como la sexualidad tienen relación con el caminar; los grandes caminantes suelen moverse del mismo modo por lugares urbanos y rurales; e incluso el pasado y el presente se reúnen cuando caminas como lo hicieron los antiguos o revives algún evento de la historia o de tu propia vida al desandar su ruta”.
A continuación recomiendo cinco libros extraordinarios que catapultan la idea de Solnit a parajes filosóficos, estéticos, políticos, místicos, sexuales y sensuales, con el afán de encontrar en la andanza de nuestros pasos un antídoto para una época cuyo vértigo y enajenación cubren el eco de nuestros propios pasos, y por ende de nuestro tránsito por este mundo.
Caminar, Henry David Thoreau, Impronta.
El arte del paseo inglés, Vv. Aa., Tumbona Ediciones.
Caminar, William Hazlitt/Robert Louis Stevenson, Nórdica Libros.
Los trazos de la canción, Bruce Chatwin, Ediciones Península.
Wanderlust, Rebecca Solnit, Hueders.
LIBRO DEL AÑO
Farabeuf, edición conmemorativa 50 años, Salvador Elizondo, Colegio Nacional.
El libro del año es una de las novelas cumbre de la literatura mexicana del siglo XX. El editor del Colegio Nacional, Alejandro Cruz, ha hecho nada más y nada menos que la edición final de este gran clásico de las letras en nuestro idioma. Portento físico, el libro incluye una reproducción bibliográfica que el autor empleó para la creación de su “libro” (como prefería que lo llamaran en lugar de novela), fragmentos del manuscrito original e incluso versiones mecanografiadas que habían permanecido inéditas hasta ahora.
Además incluye como prólogo una conferencia dictada en 1992 en la que Elizondo aborda el extraño origen de la novela —que bien sirve como un pequeño pero fascinante tratado de creación literaria— y otros textos de escritores como Juan Villoro, Margo Glantz, Emiliano Monge, Octavio Paz, Paulina Lavista o Gabriel Zaid, entre otros.
La novela de Elizondo es un hito en la literatura mexicana. Farabeuf o la crónica de un instante que está escrita —de acuerdo al texto del propio autor que aparece como introducción— sobre el método del choque de imágenes, buscando, a la manera de Poe, más un efecto sobre el lector que una mera representación, encuentra en esta edición su morada definitiva.