El concepto de Wanted, un restaurante que abrió sus puertas al público hace apenas unos meses, sigue una tendencia mundial: hamburguesas gourmet. Su nombre es una referencia al afiche de recompensa por la captura de Pancho Villa, después de que el Centauro del Norte invadiera Estados Unidos. Para los creadores de esta nueva cadena, wanted era una palabra fuerte y pegajosa.
El lugar remite a ciertas construcciones del SoHo —barrio neoyorquino en Manhattan donde las paredes interiores de los edificios antiguos eran descascarilladas con el fin de tener una mejor apariencia— y su apuesta no son las hamburguesas gigantes o de varios pisos, sino el sabor de estas y la experiencia de los comensales.
Una vez entendido su concepto, no es raro encontrar en la carta hamburguesas de cordero, avestruz, búfalo, jabalí y cocodrilo, por no mencionar cortes más comerciales como el rib eye. Las porciones son de 180 gramos y el pan es dulce, preparado con una receta de la casa.
En el menú también hay costillas, ensaladas, alitas, sopas y hot dogs (elaborados con salchichas estilo alemán e ingredientes como piña, tamarindo y tocino), y aunque los insumos son caros, los precios son accesibles.
Además, su carta cuenta con una gran variedad de cervezas artesanales, de origen nacional e importadas, así como cocteles que renuevan constantemente (pregunta por los de mezcal con kiwi o fresa).
Wanted está muy cerca de la obra del túnel Insurgentes-Mixcoac, abre todos los días a partir de las 12:30 horas y tiene un par de promociones especiales: el lunes, las hamburguesas de res están en $99 y el martes, todas las alitas y papas que puedas comerte están en $210. Si te comes cinco hamburguesas, la cuenta es gratis.