Tengo sentimientos encontrados con ese nuevo fenómeno urbano-económico-social que se ha dado a llamar la gentrificación. Por un lado, no me gusta la idea de que los barrios tradicionales de una ciudad se modernicen a través de la llegada de comercio joven y con alta movilidad social, porque significa el desplazamiento de gente, tradiciones, historia y costumbres. Pero por otro lado me gusta porque significa la llegada de nuevos burger joints.
Con apenas 15 días de haber abierto, en el espacio donde llevaban mil años las localmente famosas Happy’s Pizza, llega The Burger Shack. Muy bonito y amplio local, se antoja sentarse y disfrutar de la placita que, dicho sea, es de las más bonitas de la zona. Sentado, menú en mano, me fui por la Shack Seal —mezcla secreta de carne de res, queso americano, tocino y cebolla caramelizada—. Me gustó que la hamburguesa insignia fuera sencilla y sin florituras. La verdad no se necesita más. Tardó un poquito en llegar, pero cuando lo hizo se veía muy bien. Primera mordida y mmmmhhh. Pastosona. Segunda y subsecuentes mordidas y no mejoró la cosa. Sentí que a la carne le faltaban dos cosas importantes: sabor y consistencia. El pan, aunque propio y bien logrado, creo que es demasiado para el platillo. Hace que la burger, sumada a la falta de sabor del pattie, sepa más a pan que a otra cosa. Vamos, ni con el tocino ni la cebolla caramelizada lograba un buen sabor.
Quiero pensar que la reciente apertura y la novedad del establecimiento hacen que todavía no amarre bien. Les doy el beneficio de la duda por eso y porque me da la impresión de que pueden lograr algo bueno.
The Burger Shack
theburgershack.com.mx
Dónde: Plaza Washington 9-B, col. Juárez
Horarios: Lun a sáb: 13 a 23 h; dom: 12 a 19 h
Consumo promedio por persona: $200
