Existen muchas acciones que podemos realizar para que los vínculos que formamos alrededor construyan una red fuerte
Por Ana Paula Domínguez
El cuarto secreto de la Dra. Gladys McGarey en su libro La vida bien vivida es simple pero profundo: nunca estamos verdaderamente solos. McGarey explica que somos parte de una comunidad, de una familia, de una cultura, de un país, e incluso compartimos algo tan esencial como el aire que respiramos. Aunque somos individuos, vivimos inmersos en un tejido social que nos conecta y nos hace más fuertes.
Sin embargo, en el mundo actual enfrentamos una crisis de soledad. Aquí algunos datos impactantes:
- Un estudio de la Universidad Brigham Young reveló que la soledad puede ser tan dañina para la salud como fumar 145 cigarros al día.
- Las malas relaciones sociales se asocian con un incremento del 29% en el riesgo de enfermedades cardíacas.
- Ashton Applewhite, experto en envejecimiento, señala que la conexión social es clave para envejecer sanos y felices. También resalta los beneficios de cultivar amistades multigeneracionales.
Para McGarey, construir una red de apoyo no es sólo deseable, sino que también es nuestra responsabilidad personal.
El poder de la comunidad
En momentos de grandes retos, hemos experimentado cómo el sentido de comunidad nos sostiene. Por ejemplo, lxs chilangxs lo vivimos en los terremotos de 1985 y 2017, cuando nos unimos como una fuerza colectiva. Sin embargo, hoy en día tendemos a retraernos tras nuestras pantallas y dispositivos electrónicos, alejándonos de los demás.
Abrazar la imperfección
Es común protegernos de los demás para evitar el dolor o la decepción. La tecnología moderna facilita esta desconexión: en lugar de pedir ayuda a un vecino o coordinar con alguien para recoger a nuestros hijos, confiamos en aplicaciones que resuelven todo por nosotros. Pero, como advierte McGarey, este aislamiento tiene un costo.
Crear comunidad implica aceptar cierto caos
No todo será perfecto, pero en la imperfección reside la belleza de aprender y crecer juntos. McGarey nos invita a buscar puntos de conexión:
- Haz amigos entre tus vecinos, colegas, niños, adolescentes y ancianos.
- Usa la gentileza y la curiosidad como herramientas para construir relaciones significativas.
- Pregúntate: ¿cómo funciona mi comunidad? ¿Qué puedo mejorar para fortalecerla?
Recuerda que conectarnos con otros es esencial para nuestra naturaleza humana. Te invito a seguir la conversación en mi cuenta de Instagram @anapau.dominguez
