El ruido generado por el choque de los cuerpos
No es casual que la obra del escultor Jorge Marín intervenga la explanada del Palacio de Bellas Artes. Desde hace años, los chilangos y distintas esculturas del autor hemos convivido en espacios públicos. Nos hemos tomado fotos con ellas; por ejemplo: las Alas de México, sobre Paseo de la Reforma —quizá uno de los puntos más fotografiados de la ciudad—. Es probable que lo hagamos con su nueva obra abierta a los transeúntes: El ruido generado por el choque de los cuerpos, una escultura gigante de más de siete metros y 1.7 toneladas que se acaba de instalar frente a la entrada del Palacio.
Esta vez no se trata de otro cuerpo perfecto y angelical, como el de sus últimas obras públicas El vigilante, Equilibrio, Archivaldo o Perseidas. Esta pieza es “más humana, busca tocar el alma”, según el artista. “Está para la contemplación y para modificar la manera en que convivimos en el espacio urbano”. Claro que, puesta en la explanada del Palacio de Bellas Artes y rodeada por el ruido de los cuerpos haciéndose camino, crea una escena un poquito surrealista.
La intención de Marín es que la escultura se convierta en un habitante de un espacio histórico, flanqueado por uno de los íconos de Ciudad de México. “Se trata de una revelación, un golpe de inspiración, un impacto visual como cuando te encuentras conscientemente con tu entorno”, explica Marín. “Nos confronta con nuestro propio camino, poblado en parte por el ruido que genera el choque de los cuerpos y la actividad alienada en el afuera; y, por otra parte, el silencio de la reflexión y el pensamiento”.
El ruido generado por el choque de los cuerpos estará desde el 15 de diciembre y hasta marzo del 2018 en la explanada del Palacio de Bellas Artes. Prepara la cámara del cel.
TW: AlasJorgeMarin
FB: alasjorgemarin
También puede interesarte: El Munal lanza su primera exposición para niños y Todo sobre la exposición Rojo Mexicano en Bellas Artes.