De acuerdo con los organismos, el gobierno municipal modificó el recinto de forma unilateral sin consultarlos, a pesar del acuerdo de colaboración existente para el manejo de los cuerpos
La Secretaría de Cultura federal y el Instituto Nacional de Antropología e Historia (INAH) condenaron las modificaciones al interior del Museo de las Momias de Guanajuato, al considerar que la decisión por parte de las autoridades municipales fue unilateral sin consultar a esos organismos, a pesar de la existencia del convenio de colaboración firmado para tal efecto.
“La Secretaría de Cultura federal y el INAH celebran la intención de dignificar la exhibición de los cuerpos momificados; sin embargo, lamentan que se insista en la unilateralidad, sobre todo porque, al parecer, se fundamenta en una breve charla donde sólo se establecieron generalidades al respecto, impartida por especialistas asignados por el instituto, para hablar sobre las mejores prácticas para el manejo adecuado del citado acervo patrimonial”, señalaron en un comunicado.
Acusaron que, a la fecha, se desconocen los pormenores en cuanto a los aspectos técnicos, de conservación y manejo de los cuerpos áridos, así como de iluminación y climatización, los cuales, aseguraron, repercuten directamente sobre los restos humanos.
Al reiterar que el acuerdo no se respetó con estos cambios, recordaron el establecimiento de la colaboración con el INAH, para trabajar en la dignificación de los cuerpos momificados, sus historias, espacios y la manera en que se exhiben.
“Las instancias culturales enfatizan que la protección de los restos humanos patrimoniales no es una cuestión fundamentada en creencias personales; al contrario, años de investigación, a nivel nacional e internacional, han servido para definir protocolos de manejo y conservación de restos humanos momificados, mismos que se siguen en cada caso, considerando una serie de aspectos locales, entre los que no se encuentran las creencias religiosas personales”, añadieron.
En el comunicado señalaron que para la exhibición de los restos, se requiere de un proyecto integral, multidisciplinario, su manejo, conservación, discurso museográfico y espacio planteado para su presentación, no sólo de arquitectos y/o museógrafos.
Finalmente, advirtieron que al no convocar a los especialistas del INAH, tiene como consecuencia resultados incompletos y cuestionables. Por ello confiaron que en un próximo proyecto contarán con la información correspondiente a los cambios del recinto, para el diagnóstico y análisis de los cuerpos exhibidos, así como en el parador turístico Sangre de Cristo.