Antes de iniciar el juego de semifinales contra Costa de Marfil, decidieron manifestarse mientras escuchaban su himno nacional
Los jugadores de la Selección de Futbol del Congo protagonizaron un simbólico momento durante la semifinal de la Copa Africana de Naciones, al protestar contra los conflictos bélicos que afectan a ese país.
Minutos antes de iniciar el juego contra Costa de Marfil y cuando escuchaban las primeras notas de su himno, los 11 futbolistas se cubrieron la boca con la mano derecha y con la izquierda simularon una pistola apuntando hacia su cabeza.
“Todo el mundo ve las masacres en el Este del Congo. Pero todo el mundo se calla. Pongan la misma energía que utilizan para hablar de la Copa de África para llamar la atención sobre lo que nos pasa. No hay gestos pequeños”, señaló en su cuenta de X, Cédric Bakambu, seleccionado nacional.
Desde la década de los 90, la República Democrática del Congo está sumida en conflictos políticos, económicos y sociales que han llevado a diversos grupos a tomar las armas para disputarse el control del país. Esa situación se extendió hasta 2003, con breves periodos de paz, sin embargo, aún persisten las hostilidades, de acuerdo con datos de la Organización de la Naciones Unidas (ONU).
En la guerra se identifican principalmente a dos bandos: la milicias rebeldes como Movimiento de Liberación del Congo (MLC), el Congreso Nacional para la Defensa del Pueblo (CNDP) y la Coalición Congoleña para la Democracia (ACD). El lado contrario lo conforman el Ejército de la República Democrática del Congo con sus propias milicias, los Hutus y los mai-mai apoyados por Angola, Namibia, Zimbabue y Chad.
El Alto Comisionado de las Naciones Unidas para los Refugiados (ACNUR) señala que en 2024, como resultado de la prevalente inseguridad y del alarmante resurgimiento de la violencia perpetrada por grupos armados irregulares en los últimos dos años, casi seis millones de personas han sido desplazadas en las provincias de Ituri, Kivu del Norte, Kivu del Sur y Tanganyika.
Asimismo, el organismo internacional advierte una alta cifra de personas desplazadas de sus hogares en el territorio congolés; durante 2022, 600 mil personas huyeron, y en todo el país la cifra se acercó a los 6 millones, frente a los 5.5 millones de 2021.