A pesar de sus 69 años de carrera y de seguir en gira con los Grandes del Rock, la actriz y cantante sigue buscando espacios para interpretar grandes papeles en el cine y la televisión
La relación con el público es como una amistad de muchos años y para Angélica María, ha sido casi como un romance bien correspondido.
“Es una entrega de ambas partes. Al estar en un escenario yo doy todo de mi y las personas ofrecen todo lo que tienen. Se desconectan de lo que hay afuera para conectarse con lo que ocurre dentro de la sala. Es un amor genuino que nunca terminaré de agradecer”, dice.
La “novia de México” nació en Luisiana, Estados Unidos, y llegó a vivir a nuestro país a los cinco años, tras la separación de sus padres. En alguna ocasión, su tía, la actriz Yolanda Ortiz, llevó a la pequeña Angélica Hartman a una fiesta en la que mostró dotes actorales y la invitaron a iniciar una carrera.
Todo fue tan rápido que a los seis años ya había ganado un premio Ariel y a principios de los años 60, con menos de 15 años, tuvo la inquietud de cantar. Conoció a un joven pianista llamado Armando Manzanero y juntos pusieron en los primeros lugares internacionales la canción “Eddy Eddy”.
Años después, compartiría escenarios fílmicos y musicales con Pedro Infante, Juan Gabriel, Vicente Fernández y otros grandes del rock and roll como Alberto Vázquez, Enrique Guzmán y César Costa, amigos suyos con los que sigue cantando.
En números, la carrera de Angélica María está representada en 67 películas, 20 telenovelas, 16 obras de teatro, 56 videoteatros, 64 fotonovelas, participación en más de 600 programas de televisión y más de 500 canciones grabadas en 64 discos.
Seguir en la actuación
Angélica María cuenta con una Estrella de la Fama en Hollywood, logró un récord al llenar el Madison Square Garden dos veces seguidas y suma más de 244 premios en sus 69 años de carrera artística. Aún así, sigue buscando oportunidades trascendentes, que le permitan crear, a pesar de que en los últimos años, dice, los productores no la buscan para los papeles importantes en cine o televisión.
“Me gustaría seguir trabajando, pero como que no me buscan mucho para hacer cosas importantes. A lo mejor los jóvenes, que son los que ahora hacen todo, ya no están tan informados de lo que fui, de lo que soy y de lo que hago”, asevera.
Y señala que en muchas ocasiones le ofrecen papeles que para ella no valen la pena pues no requieren de esfuerzo o interpretación, por lo que ha decidido rechazarlos. “Quiero hacer papeles simpáticos o interesantes, que sea un buen personaje en el que yo pueda crear, que no sea alguien que solo aparezca sentada en una silla, admirando el paisaje. Ese tipo de cosas no las quiero hacer, son intrascendentes”.
La primera actriz menciona que estaría dispuesta a trabajar en cine, televisión o en las plataformas de streaming siempre que le ofrezcan algo que la atrape, lo que por ahora no haría, dice, es teatro, pues implicaría ausentarse largo tiempo para los ensayos y presentaciones y actualmente también busca una oportunidad que le permita estar al pendiente de sus nietos.
“Fuera del escenario soy muy normal. Como cualquier persona voy al súper, le pongo gasolina al coche, me gusta cocinar, arreglo mi casa, llevo a mis nietos a sus clases y vamos a pasear. Ahorita trato de aprovecharlos mucho porque cuando crezcan ya no me van a hacer caso”, dice entre risas.
Los grandes del rock
Cada que Angélica María está a punto de subir a un escenario, los nervios intentan traicionarla. Siente un dolor en el estómago, un mareo que parece que no se detiene y una sensación súbita de sueño le hace tener ganas de pegar una carrera e irse a casa a descansar. ¿Qué la detiene? El público, dice.
“Antes de entrar me da sueño, solo quiero salir corriendo. Pero al primer aplauso me doy cuenta que de ahí soy. Creo que nunca se me van a quitar esos nervios, ese golpe de adrenalina de que nunca sabes qué va a ocurrir, si se te va a olvidar la letra, si te vas a quedar sin voz o si te vas a caer, como ya me pasó una vez”.
Para Angélica María, el rock and roll sigue teniendo un público cautivo que no solo está en la gente mayor, sino que ellos contagiaron a la familia, les enseñaron a escuchar. Dice estar sorprendida que a los conciertos van padres, hijos y nietos, y que en ocasiones los más jóvenes son los más emocionados.
“Hasta ahora me siento muy agradecida por todo el cariño que me da la gente, sus aplausos me inyectan vida, por eso seguimos trabajando y haciendo presentaciones de los Grandes del Rock. A la gente de mi edad le gusta recordar la música que escuchaban cuando eran jóvenes, les evocan sus noviaz- gos, las salidas a bailar, sus experiencias. En nosotros pasa lo mismo y eso es bellísimo”, dice con su tono de voz suave.
La “novia de México” cuenta que para el próximo concierto tendrán sorpresas como la incorporación de Benny y Julissa, quienes prepararán las canciones del musical Vaselina, que interpretaron años atrás.
“Roberto Jordán, César Costa y Enrique Guzmán presentarán lo mejor de su repertorio, y en mi caso, hice varios popurrís para que la gente pueda escuchar casi todas las canciones que les gustan, porque a veces salimos del concierto y me dicen que no canté “su canción”. Ahora ya las puse para que todos se vayan felices”.
El concierto de los Grandes del Rock se llevará a cabo el 1 de septiembre, a las 19:00, en el Auditorio Nacional.