Con el reciente estreno de True Detective: Night Country, la directora mexicana Issa López revela los pequeños detalles que son parte de su proceso creativo
En una tierra fría y sumergida en la oscuridad, la jefa de policía Liz Danvers y la detective Evangeline Navarro (degradada de su puesto) se unen para resolver un caso que tiene tanto posibles conexiones con un crimen del pasado como con elementos sobrenaturales. De eso va la cuarta temporada de True Detective que, aunque la serie nació de Nic Pizzolatto, ahora tiene a Issa López como showrunner.
La directora, productora y escritora chilanga disfruta del género de terror y con Night Country está en su terreno, nada más y nada menos que con Jodie Foster (The Silence of the Lambs) y Kali Reis (Catch the Fair One) como protagonistas. En entrevista, explica cómo lo sensorial no falta en su proceso creativo.
Naciste en la Ciudad de México, ¿qué es lo que más disfrutabas de esta en ese entonces y ahora?
Cómo moverse exactamente en las calles, cómo hablarle a la gente, a qué rincones ir. Yo crecí en Tlatelolco y mi papá sabía exactamente a dónde ir en la colonia Guerrero para tener el mejor café tostado, cómo ir al café La Habana y dónde comprar churros en El Moro —antes de que fuera esta cosa en la Condesa—, dónde afilar los cuchillos y dónde encontrar al mejor sastre… Hay una cosa de la vieja Ciudad de México que no he encontrado en ningún otro lugar del mundo y es su sonido, es muy específico. Entonces, desde el momento en que llegas, esa mezcla de sonido, de luz, de olores específicos inmediatamente te hace sentir en casa.
Lo anterior tiene que ver con lo sensorial y eso también se refleja mucho en tu trabajo, ¿qué lugar ocupa dentro de tu proceso creativo?
Es enorme, desde que tú lees un guión mío te vas a dar cuenta de que estás escuchando el diseño sonoro. Muchisísimo de la escritura tiene que ver con lo que escuchas, desde el viento, el silencio, toda la atmósfera sonora es central. Y lo visual también; mi vida entera he coleccionado imágenes de todo. Tengo archivos infinitos de referencias visuales y cuando empiezo a escribir a veces no encuentro el siguiente evento, entonces a través de mirar referencias visuales es que surge. Es con esa mezcla de imagen, sonido y luz que puedo poner la historia en papel.
En la vida real hay muchas cosas que no tienen nombre y trascienden desde la emoción; eso también atraviesa mucho tu trabajo, ¿cómo lo logras?
Ahí es donde entra lo sensorial. Creo que el mejor cine es aquel que explora lo que no está a cuadro, las cosas que no están dichas, las sugerencias, lo que te imaginas más que lo que enseñas. Siento que el presupuesto de producción que lleva la audiencia en su cabeza es infinito y que, si dejas los monstruos en ellos y no en la pantalla, van a ser mucho más terroríficos que los que tú puedas hacer con efectos visuales y maquillaje.
Llegas con una gran trayectoria a este proyecto en el cual, además, logras consolidar una constelación de mujeres, ¿cómo fue para ti lograrlo?
IL: Todas las mañanas me despierto sin poderlo creer y eso va a seguir sucediendo un rato, creo. Peleé muchos años por esto, hay una parte mía que desde luego no lo puede creer y otra que sabe que era cuestión de tiempo porque llevo trabajando 27 años en televisión, primero, y luego en cine; en México trabajé un chorro de años, desde 2009 también trabajé en Estados Unidos y en Inglaterra, desarrollé proyectos que estuvieron muy cerca de hacerse muchas veces y que todavía pueden salir del olvido. Pero era hora.
¿Qué es para ti True Detective, para invitar a la gente a que la conozca más de cerca?
IL: Es un viaje hacia los secretos oscuros de la humanidad, siempre existe la sugerencia de que hay algo más allá de lo que puedes ver y esa cosa es peligrosa, siniestra y tiene que ver con la maquinaria de cómo funciona el universo. Entonces, más allá de una historia de detectives, tiene que ver con la fábrica de todas las cosas.
*Entrevista realizada por Gina Jaramillo para Radio Chilango; el texto ha sido editado para dar brevedad y claridad