Si hay gente formada, seguramente está rico. ¿Es cierto? ¿Vale la pena pagar con tiempo por estas comidas chilangas? Los probamos por ti, y este es nuestro veredicto
Un restaurante lleno es un restaurante bueno, suele decirse. No necesariamente es verdad, pero es un silogismo popular: los changarros ricos están llenos/este changarro está lleno—este changarro está rico.
Las filas eternas son las que le han dado fama a muchos restaurantes, puestos de calle, fondas y food trucks en la Ciudad de México. ¿Será que todos valen la espera o es solo la leyenda de la fila?
Mucho nos han dicho que todo lo que vale mucho cuesta mucho, pero la duda nos mueve: ¿en serio vamos a perder una hora de nuestro hermoso tiempo en la fila de las tortas, los esquites o las quesadillas? Fuimos a probar varios de estos changarros para identificar aquellos por los que sí vale la pena pagar con tiempo bajo el sol chilango.
La Esquina del Chilaquil
Qué hay: Tortas de chilaquiles.
Cuánto tiempo: A las 8 de la mañana harás media hora. La Güera (Perla Flores) es rapidísima. El retraso es porque hay quien pide 30, 80 ¡o 300!
¿Espero o me voy? Espera solo porque son un clásico (pide la campechana: chilaquiles verdes y rojos, milanesa y cochinita pibil con habanero). Aunque no son las únicas tecolotas de la ciudad, quizá son las originales: se cree que doña Nati, la abuela de La Güera, es la inventora.
Esquina de Alfonso Reyes y Tamaulipas, Condesa
El Jarocho de las Lomas
Qué hay: Cocteles de camarón, pulpo, caracol, jaiba; empanadas, pescadillas, tostadas y filetes.
Cuánto tiempo: Hay dos filas de media hora. Una para los cocteles y otra para todo lo demás.
¿Espero o me voy? Vete o llega muy temprano. La relación precio-calidad es buena y la salsa especial de don Elliot Nez es una delicia. Sin embargo, aunque todo está rico, el tiempo es más valioso.
Esquina de José de Iturrigaray y Boulevard de los Virreyes, Lomas de Chapultepec
El Turix
Qué hay: Cochinita pibil.
Cuánto tiempo: En hora pico, de 30 a 40 minutos.
¿Espero o me voy? Espera. O ve a la 1 de la tarde. Su interpretación de la gloriosa cochinita pibil yucateca es fabulosa. Elige el panucho y aguas con la salsa de habanero, es canija.
Emilio Castelar 212, Polanco
Tamales Fer
Qué hay: “Los mejores tamales de piña de CDMX”.
Cuánto tiempo: Media hora. La gente se forma antes de que don Fernando llegue.
¿Espero o me voy? Espera. Son perfectos: esponjados, bien salseados pero no aguados, en el punto exacto de sabor y ¡recién hechos! Nada de sabores exóticos, don Fer es fiel a la receta básica que ya domina como un jedi tamalero. El de rajas con queso y el de piña son los absolutos mejores y también los codiciados.
Xochicalco 295, Narvarte Poniente
Big Daddy
Qué hay: Jochos gigantes con chili.
Cuánto tiempo: 20 minutos, despachan rápido.
¿Espero o me voy? Espera. La experiencia de su hot dog de 50 centímetros lo vale (pero se acaban rápido). Pídelo con todo (pepinillos, tocino y chili).
Av. San Antonio 352, Col. Nonoalco
Esquites Don Josué
Qué hay: Elotes y esquites (normales, con tuétano, con camarón, con pollo o con tocino).
Cuánto tiempo: Martes, jueves y sábado (cuando hay esquites con tuétano): de 30 a 60 minutos.
¿Espero o me voy? Espera, pero no demasiado. Su receta de esquites con tuétano es una institución.
Esquina de Eje Central y Xola, Narvarte
IHOP
Qué hay: Perfectos y esponjosos pancakes.
Cuánto tiempo: Entre 40 y 50 minutos.
¿Espero o me voy? Vete. La carta es amplia, pero la comida no es taaan rica —a excepción de sus perfectos pancakes— y el lugar es muy caro.
Montecito 38, Nápoles
El Pescadito
Qué hay: Taquitos de pescado y mariscos.
Cuánto tiempo: 40 minutos a la hora de la comida.
¿Espero o me voy? Espera, sobre todo si tu antojo del clásico taco de pescado rebozado con mayonesa, salsa picante, limón y ensalada de col es mucho. Los tacos son buenos, gordos y baratos.
Varias sucursales
El Moro
Qué hay: Churros con chocolate.
Cuánto tiempo: Una hora, en hora pico.
¿Espero o me voy? Vete. La peor idea es ir a cenar churros con chocolate a El Moro original (en el Centro). Es un clásico, pero puedes vivir sin ir —o ir después de media noche o a otra sucursal.
Eje Central Lázaro Cárdenas 42, Centro Histórico
Los Machetes de Amparito
Qué hay: Quesadillas gigantes de queso, carne…
Cuánto tiempo: Una hora, en hora pico.
¿Espero o me voy? Vete. Nada tienen de especiales, ni siquiera la estrella de la casa (“champion”: con bistec, tocino, pimiento cebolla y queso).
Héroes 192, Guerrero
Fonda Margarita
Qué hay: “El mejor desayuno de tu vida”.
Cuánto tiempo: Esta fila no es para novatos. La gente comienza a llegar desde las 5:30 de la mañana. Si llegas a las 9, nada puede garantizarte que alcanzarás comida.
¿Espero o me voy? Espera. El mismísimo Anthony Bourdain dijo que ahí probó el “mejor desayuno de mi vida”. La comida no tiene ciencia, pero sí inigualable sazón. Pide los huevos tirados y el chicharrón en salsa verde.
Adolfo Prieto 1364, Tlacoquemécatl Del Valle
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