Para conservar tu vehículo en buen estado el mayor tiempo posible, es necesario brindarle cuidados y mantenimiento tanto por fuera como por dentro
Cuando adquirimos un auto debemos estar conscientes de los cuidados que implica tenerlo: desde los cambios de aceite hasta los procesos de verificación vehicular.
Por suerte no necesitas ser un experto para realizar todas estas acciones, solo requiere de tiempo y compromiso.
Hoy, te presentamos algunos consejos para mantenerlo en buenas condiciones tanto en la parte externa como en el funcionamiento, a fin de evitar estragos durante el paso del tiempo.
1. Protege tu auto del sol
En temporadas calurosas, lo ideal es estacionarlo en lugares con sombra para evitar que los rayos del sol afecten la pintura. Igualmente, puedes colocarle un parasol para que el tablero, los asientos o el volante no se dañen; una pequeña toalla también es una gran opción.
2. Quítale esos rayoncitos
Si tu auto ya tiene varios, lo primero que debes hacer es evaluar qué tan profundos están. Si el daño no es muy grave, existen muchos productos pulidores para quitarlos fácilmente o simplemente disminuirlos. Pero si el raspón es profundo, lo mejor es consultar a un especialista para que te ofrezca otras alternativas.
3. Revisa las llantas
Si los neumáticos ya están muy lisos o tienen irregularidades en su forma, lo más seguro es que necesites cambiarlos. Asimismo, es importante que los mantengas con la presión adecuada; en este caso, te sugerimos revisar el manual para verificar la especificación correspondiente.
4. ¡Ojo con el aceite!
Cuando el indicador del aceite se enciende, significa que hay una caída de presión en el sistema de lubricación del motor. Esto puede que sea por dos razones: puede haber una fuga o quizás se requiere de un abastecimiento. En la mayoría de los casos siempre es la segunda opción por falta de mantenimiento. Recuerda que conducir sin el nivel necesario de aceite ocasionará daños graves en el motor.
5. Refacciones adecuadas
Si tu auto necesita refacciones nuevas, lo mejor es comprar de buena calidad ya que esto podría alterar otros componentes mecánicos. Si lo haces en lugares informales puede que te vendan una pieza no original; a veces, optimizar resulta peor. Si el producto es difícil de conseguir, busca asesoría de un experto.
6. Que no avance el óxido
Una combinación de factores provoca que estas manchas aparezcan: el clima, el paso del tiempo e incluso los materiales son algunos ejemplos. Una recomendación es no estacionarlo sobre el pasto o superficies mal drenadas. Además, mantenerlo limpio y seco contribuirá a que el óxido no se acumule rápidamente. Si la oxidación está muy avanzada, deberás sustituir la pieza afectada.
7. Vestiduras impecables
Definitivamente, mantener limpias las vestiduras de nuestro auto siempre es complicado, sobre todo cuando abordan los más pequeños. Por ello, procura darles mantenimiento por lo menos cada seis meses usando esponjas suaves y un shampoo especial. Si quieres una limpieza profunda, llévalo a un autolavado profesional.
8. No se te olvide la verificación
Este proceso es de los más importantes. La verificación vehicular se encarga de medir la concentración de gases producidos por la combustión que genera un vehículo cuando está en funcionamiento. Afinar nuestro vehículo por lo menos una vez al año, tendrá sin duda un impacto positivo en el medio ambiente y la salud de la población.