Los bachilleratos por internet que ofrece el gobierno de la ciudad no están dando los resultados esperados: los alumnos no van a las sedes delegacionales y pocos concluyen el programa
Es martes y son las 9:15 de la mañana. Hace 30 minutos que abrieron las puertas de la sede del bachillerato a distancia de Coyoacán, ubicado en la esquina de las calzadas de la Virgen y de Tlalpan y, en teoría, debería acudir una manada de alumnos a usar una de las 30 computadoras disponibles para cursar su preparatoria en línea. Pero como siempre, las aulas permanecerán vacías.
La persona encargada de esta sede –quien prefiere no revelar su identidad– dice que incluso los fines de semana, cuando los estudiantes presentan sus exámenes en las instalaciones, quedan varios asientos libres. Las computadoras parecen obsoletas cuando ya la mayoría de las personas cuenta con una en su casa.
No es un caso aislado, el fenómeno se presenta en las 30 sedes delegacionales de la ciudad. Cuando menos así lo revela el último informe de avance trimestral de la Secretaría de Educación, donde se explica que entre abril y junio de 2015 se atendieron, en promedio, 269 estudiantes por cada sede, mientras que en el mismo periodo del año pasado, la cifra fue de 481 alumnos. En un año bajó casi la mitad de asistencia a estos centros.
LOS ORÍGENES
En 2007, la UNAM se alió con el gobierno capitalino para crear el Bachillerato a Distancia del Distrito Federal, que brinda una alternativa en línea a quienes no pueden acudir a un salón de clases.
Cinco años después, en 2012, el gobierno de la ciudad abrió una nueva modalidad: el Bachillerato Digital de la Ciudad de México. Con la diferencia de que el nuevo sistema de la Secretaría de Educación del Distrito Federal crearía su propio plan de estudios en lugar de usar el de la Universidad Nacional Autónoma de México (UNAM).
Quien conoce perfectamente ambas modalidades es María del Carmen Ruíz, coordinadora de las tres sedes delegacionales que se encuentran en Cuauhtémoc, desde que inició el programa. Según ella, cada vez menos estudiantes se acercan a las sedes debido a varios factores, entre ellos, la falta de mantenimiento de las computadoras y la escasa inversión en publicidad.
Para contrarrestar esta baja, María y su equipo de trabajo imprimen sus propios volantes con información del programa e incluso salen a jornadas vecinales y a exposiciones para promover entre los jóvenes estas modalidades de bachillerato digital.
“Aquí dejaron de venir hace tres años. Hubo un problema que nos dejó sin internet casi un año y desde entonces ha bajado el número de asistentes”, explica María al hablar de la sede que se encuentra en el sótano del edificio de la delegación Cuauhtémoc.
REPROBADOS
Las cifras del reporte trimestral de la Secretaría de Educación no son alentadoras: sólo 43% de quienes ingresan al programa terminan sus estudios y únicamente 54 % de los estudiantes inscritos en cualquiera de los cuatro semestres del curso logra terminar su módulo sin adeudar materias.
Además, el documento muestra que el programa es insuficiente para cubrir la demanda de quienes requieren este servicio, ya que dos de cada tres personas que participaron en la convocatoria pasada para formar parte de la plantilla estudiantil del bachillerato en línea –en cualquiera de sus modalidades– no fueron seleccionadas.
Se buscó a la titular de la Secretaría de Educación de la ciudad, Alejandra Barrales, para hablar sobre el programa, pero no se pudo concretar una entrevista con la funcionaria.
ERRORES DEL SISTEMA
María añade un problema adicional: el 1 de septiembre se abrió una nueva convocatoria para brindar un espacio en el bachillerato digital o semipresencial para cuatro mil 600 interesados pero, por un error en el sistema, se vieron afectados decenas de jóvenes que buscaban un espacio en esta sede en particular.
El anuncio del jefe de Gobierno capitalino, Miguel Ángel Mancera, sufrió un pequeño revés en la práctica, debido a su falta de organización.
Como relata la coordinadora de la sede de Cuauhtémoc, tardaron una semana en funcionar las claves para registrar a los aspirantes de su plantel, así que tuvieron que devolver a su casa a todos los que llegaron a preguntar sobre la convocatoria. Durante este tiempo, los interesados de otras sedes sí fueron registrados, por lo que sus alumnos se quedaron sin cupos, ya que el gobierno determinó quién se quedó en el programa únicamente de acuerdo con la rapidez con la que fueron subidos los registros de manera adecuada al sistema.
PROGRAMA BAJO LUPA
El GDF está pensando en reinventar el programa del bachillerato por internet. La Secretaría de Educación local pagó la cantidad de 232 mil pesos entre febrero y junio de este año para que el consultor en informática y políticas públicas Guillermo Levine desarrolle un diagnóstico y proponga nuevas acciones para mejorar el esquema que se maneja actualmente.
El contrato también lo obliga a analizar las políticas educativas en nivel medio superior, para revisar si están funcionando.
SI TE INTERESA LA PREPA DIGITAL:
Si no tienes tiempo de acudir a un salón de clases, puedes dedicar un par de horas al día para estudiar en línea.
- Para ello, es necesario cumplir con unos requisitos mínimos establecidos por el GDF.
- Tener entre 15 y 29 años de edad y mantener una residencia de forma permanente en la Ciudad de México.
- Haber concluido satisfactoriamente los estudios de secundaria con un promedio aprobatorio.
- La convocatoria permanecerá abierta hasta el próximo 4 de octubre en la página de internet www.ead.df.gob.mx
RECOMENDACIONES:
En México, 80 por ciento de los alumnos que ingresan a su primer año de bachillerato no tienen “ningún dominio registrable” del idioma inglés. Para saber más, se encuentra el estudio “Sorry”, de la organización Mexicanos Primero:
https://www.mexicanosprimero.org/images/stories/sorry/Sorry-digital-ok.pdf
VIDEOS:
¿Cómo son las sedes delegacionales del bachillerato a distancia? Así las muestran las autoridades:
El Gobierno del Distrito Federal tiene entre sus programas “Prepa Sí”, que ofrece un apoyo económico a los jóvenes que quieren realizar sus estudios de bachillerato pero no tienen suficientes recursos:
