Más de siete mil peatones han sufrido alguna lesión por parte de automovilistas en los últimos cinco años.
En Paseo de la Reforma y la incorporación a la lateral del Circuito, donde inicia el Bosque de Chapultepec, hay un cruce de no más de cinco metros que es todo un reto para cualquier peatón. La vuelta es continúa, ningún automovilista cede el paso, los microbuses viran aun más rápido y la persona que busca el momento propicio para cruzar debe esperar varios minutos. El objetivo se logra cuando se forma un grupo de tres o cuatro peatones, hacen un frente común y obligan a los conductores disminuir la velocidad.
Algunos kilómetros más adelante, en Paseo de la Reforma e Insurgentes, la escena se repite. Para cruzar alguna de las dos avenidas, los peatones deben enfrentar a los autos que invaden el paso, los camiones arrancan aunque el siga haya sorprendido al caminante a media calle, las vueltas continuas son al menos tres, además aquí también hay que sortear el paso de los ciclistas.
En la Ley de Movilidad del Distrito Federal, que se aprobó el año pasado y que aún está pendiente la publicación de su Reglamento de Tránsito, se establece que el peatón tiene la prioridad en el uso de la vía pública. Pero la realidad muestra que no es así: ser peatón en la Ciudad de México es todo un reto.
De acuerdo con datos de la Secretaría de Seguridad Pública (SSP) del DF, proporcionados como respuesta a una solicitud de información pública, del 2010 a la fecha, siete mil 354 peatones han sido lesionados por automovilistas y 207 han fallecido al ser atropellados.
Además, el número de peatones lesionados por ciclistas se ha incrementado: en 2013, la SSP-DF reportó 10 casos y en 2014 se registraron 36.
Para Bernardo Baranda, director del Instituto de Políticas para el Transporte y el Desarrollo (ITDP), es necesario hacer cambios en la infraestructura de la ciudad para disminuir el número de peatones que sufre algún accidente.
“Ya se sabe cuáles son las intersecciones donde hay más incidentes… Hay que proteger ahí al peatón: mejorar la iluminación, reducir velocidades de los autos, hacer los cruces más directos, el pintado de las cebras, los semáforos, en fin, toda una serie de técnicas”, señala Baranda.
Los automovilistas son los que más hacen a los peatones ver su suerte: en 2011, dos mil 365 peatones sufrieron alguna lesión provocada por un auto. En los dos años siguientes, esta cifra registró un descenso, pero en 2014 volvió a elevarse para sumar mil 907 incidentes, mientras que en lo que va de este año han sido 499 los peatones agredidos.
Una tendencia similar ocurrió con los registros de muerte: 2011 ha sido el peor del último lustro, con 62 peatones fallecidos por un accidente donde estuvo involucrado un automovilista. Las cifras descendieron a 54 y 17, en 2012 y 2013, respectivamente. En 2014, el número aumentó a 42 fallecimientos.
¿Y LOS CICLISTAS?
De acuerdo con la SSPDF, de 2011 a 2014 sólo ha habido un ciclista muerto por año, mientras que de 2015 no conserva ningún registro. Estas cifras no concuerdan con los registros que llevan las organizaciones de ciclistas de la ciudad. Por ejemplo, Bicitekas señala que de 2009 al 2014 fallecieron, por lo menos 14 ciclistas atropellados por automovilistas.
Además, se han documentado cinco fallecimientos de ciclistas en lo que va de 2015.
En cuanto a las lesiones, la tendencia es similar a la de los peatones: el peor año fue 2011, en el que la SSP reporta 71 ciclistas lesionados; una cifra que disminuyó a 57 el siguiente año; mientras que en 2013 y 2014 se registraron 44 y 48, respectivamente.
Baranda recordó que la estrategia integral de movilidad debe trabajarse en tres rubros: mejorar la infraestructura, sobre todo en los cruceros que se pueden hacer más seguros con señalización y reducción de las velocidades de los autos; la aplicación de la ley, que incluye prevención, y la cultura de la educación vial, que tiene que ver con capacitar y hacer campañas.
En cuanto a la aplicación de la Ley de Movilidad del DF, la cual fue publicada hace un año, el gobierno capitalino ha quedado a deber el examen a automovilistas para obtener la licencia, del cual se ha hablado desde hace tres años, así como el Reglamento de Tránsito.
“La Secretaría de Seguridad Pública y la policía de Tránsito tienen un gran reto de aplicar la ley, que sea respetada y abatir la corrupción, así como que se involucren en una estrategia de seguridad vial, en la cual es el peatón el que tiene la prioridad”, apunta Baranda.
El especialista comenta que, además, es necesario comenzar a diseñar acciones dirigidas a los ciclistas para que también ellos respeten los espacios de los peatones y el Reglamento de Tránsito.
DATOS
282 ciclistas han sido lesionados por un automóvil desde 2010.
36 peatones fueron lesionados por ciclistas en 2014.
2 meses y medio lleva de retraso el GDF en la publicación del nuevo Reglamento de Tránsito.
PRIORIDAD QUE NO SE VE
El artículo 1 del Reglamento de Tránsito Metropolitano vigente establece que la prioridad en el uso de la vía pública es la siguiente:
1. Peatón
2. Ciclista
3. Usuario y prestadores de servicios de transporte de pasajeros
4. Usuarios de transporte particular
5. Usuarios y prestadores de servicios de transporte de carga.
¡CUIDADO AL CRUZAR!
Algunos de los cruceros peatonales que la Secretaría de Seguridad Pública (SSPDF) ubica como los más peligrosos de la Ciudad:
Delegación Cuauhtémoc
Eje Central y República de Uruguay
República del Salvador y Madero
Plaza de la Constitución, 20 de noviembre y Pino Suárez
Delegación Venustiano Carranza
Ignacio Zaragoza y Circuito Interior
Fray Servando y Eje 2 Congreso de la Unión
Zaragoza e Iztaccihuatl
Delegación Benito Juárez
División del Norte y Universidad
Patriotismo y Empresa
Eje 6 Sur Holbein e Insurgentes
Delegación Miguel Hidalgo
Avenida Jalisco y Circuito Interior
José Vasconcelos y Avenida Revolución
Mariano Escobedo y Presidente Masaryk
Delegación Álvaro Obregón
Avenida Santa Lucía e Hidalgo
Avenida del Rosal y Santa Lucía
Calzada de las Águilas y Calzada de los Leones
SEGURIDAD PEATONAL
En su estudio “Caminar con seguridad. Breve panorama de la seguridad peatonal en el mundo”, la Organización Mundial de la Salud revela que hay acciones de diseños urbanístico que aumentan el riesgo de accidentes para los peatones.
La OMS señala que en el diseño de las vías se debe priorizar las necesidades de los peatones e incorporar infraestructura exclusiva para ellos. También destaca que aumenta el riesgo si no se cuenta con aceras, cruces peatonales elevados y alumbrado.
En este estudio también se menciona que en países de bajos y medianos ingresos, 84% de las vías con presencia peatonal son rutas con velocidad máxima permitida de 40 Km/hr, pero sin ninguna acera o vía peatonal.
Además, se destaca que disminuir la velocidad promedio un cinco por ciento puede dar lugar a una reducción de 30% del número de choques fatales.