Los peritos del GDF emplean un protocolo basado en el de las aseguradoras a la hora de resolver un percance vial en el que no existe acuerdo entre las partes
Imagina que tuvieras en tus manos una fórmula capaz de revelarte quién tiene la culpa en un accidente de tránsito. Para descubrir al responsable, sólo tendrías que elegir un número clave y asignarlo a cada uno de los automovilistas involucrados, usando una lista que incluye cientos de tipos de choque. Después, cotejarías los números en una tabla, cruzarías los datos y ¡pum!, tendrías al culpable. Sin necesidad de acudir a un Juzgado Cívico.
Pues este manual existe, pero si no lo conoces, probablemente sea porque hasta la fecha se ha mantenido como un secreto celosamente guardado por los ajustadores de seguro y las instancias de gobierno que lo emplean para dirimir responsabilidades en accidentes de tránsito.
Por eso es que si tu auto está asegurado y solicitas apoyo después de un percance –sin lesionados–, verás llegar el ajustador con un libro de 156 páginas intitulado Guía de Deslinde para las Compañías de Seguros.
El documento, empleado desde 2009 por compañías privadas, fue utilizado –como se puede leer en la edición del 14 de febrero de 2014 de la Gaceta Oficial del Distrito Federal– como referencia para elaborar el protocolo que utilizan actualmente los peritos de los Juzgados Cívicos en la Ciudad de México.
Aunque la diferencia entre el protocolo que creó el gobierno capitalino y la guía de las compañías de seguros es que el del GDF contempla únicamente 22 tipos de accidentes, mientras que la guía incluye 274 casos diferentes.
Considerando el hecho que la mitad de los autos en la ciudad no está asegurada –según datos de la Asociación Mexicana de Instituciones de Seguros (AMIS)-, la distribución pública del documento permitiría facilitar los arreglos legales entre conductores accidentados, así como reducir la asimetría de poder que se puede presentar entre un ciudadano desorientado en un choque y peritos y ajustadores profesionales.
UNA PRIMERA VERSIÓN PÚBLICA
A siete años de su elaboración, la AMIS está lista para hacer pública una primera versión de esta guía para accidentes de tránsito. De acuerdo con Luis Álvarez, director de daños de esta asociación, el texto debería ofrecerse a la ciudadanía antes de que termine el año 2015. Mientras que la versión reducida del GDF ya se encuentra en línea, disponible en la página de la Gaceta Oficial del Distrito Federal, bajo el título de “Protocolo de Actuación del Perito en Tránsito Terrestre de la Consejería Jurídica y de Servicios Legales del Gobierno del Distrito Federal”.
“(Cuando se usa la guía) ya no hay discusión, se aminoran los tiempos, se reducen costos. De hecho, ni siquiera se llega al Juzgado Cívico, porque ahí mismo se deslinda la responsabilidad”, dice Miguel Guzmán, director de seguridad vial para el Centro de Experimentación y Seguridad Vial (Cesvi), una de las instituciones que colaboró en la creación de este documento en 2009.
Y es que todos los días, los jueces cívicos de la capital atienden un promedio de 27 casos de conductores que no pudieron llegar a un acuerdo en el lugar del accidente, según datos de la Consejería Jurídica y de Servicios Legales. Un número que debería disminuir sensiblemente con la masificación del manual.
Sin embargo, no todos los accidentes de tránsito podrían evitar el paso a los Juzgados Cívicos, ya que, como asegura el subsecretario de Control de Tránsito de la Secretaría de Seguridad Pública de la ciudad (SSPDF), Fernando Martínez, “luego el problema no es que no quieran pagar, sino que no están de acuerdo en la cantidad que les toca” y, para eso, aún no existe ningún manual.
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EL ABC DE LOS CHOQUES
Puedes consultar la guía de accidentes del gdf en: https://goo.cl/UOnxE
- Toma una foto: Si no hubo lesionados, hay que orillarse para no estorbar el tránsito. De requerir pruebas, puedes tomar una fotografía del accidente y después orillar el vehículo.
- Llama a tu seguro: Los conductores deben llamar a sus respectivos seguros para que determinen de quién fue la culpa o presentarse ante el Juzgado Cívico.
- Depósitos: Los autos son remitidos a uno de los corralones de la Secretaría de Seguridad Pública en lo que se define la situación del conductor.
- Emergencias: De haber lesionados, se debe llamar a los servicios de emergencia. Puede ser vía telefónica, por redes sociales o accionando uno de los botones de emergencia de la ciudad.
- Finados: En caso de haber muertos, todos los conductores permanecen en calidad de detenidos para desahogar el caso a través de las agencias del Ministerio Público.
AGUAS CON LAS DISTRACCIONES:
Algunos gestos cotidianos pueden revelarse fatales a la hora de manejar en la CDMX.
- De acuerdo con un estudio del Cesvi, 80% de los accidentes de tránsito ocurre por errores humanos, como hablar por celular mientras uno conduce.
- El segundo factor más común por el que suceden más choques, con 13%, es una falla en el entorno, como hoyos y baches en el pavimento.
- Mientras que en tercer lugar se encuentran las fallas en el vehículo, con 7% del total de los accidentes.
CIFRAS:
- 25 mil pesos es el costo promedio por accidente en la CDMX.
- 5 mil 668 casos de choques fueron atendidos en el DF de enero a julio 2015.
- 8 millones de pesos fueron recuperados por los Juzgados Cívicos de la ciudad, por daños al mobiliario a causa de accidentes de tránsito.
Fernando Martínez, Subsecretario de Control de Tránsito de la Secretaría de Seguridad Pública (SSPDF): “El policía debe ser imparcial, no debe decir quién tiene la culpa, para eso está el perito”.