Cada familia chilanga gasta hasta 13.6% de sus ingresos sólo en pagar la educación de sus hijos, así que lo mejor es ahorrar, dicen los que saben.
Nora y su esposo, Antonio, no pagan sólo una colegiatura ni dos ni tampoco tres, sino cuatro. Tres de sus hijos —trillizos— pasarán al segundo año de secundaria de un jalón, y el otro entrará al primer año de la primaria.
Para este regreso a clases, Nora y Antonio ya hicieron cuentas: gastarán en cada uno de sus hijos un promedio de seis mil 675 pesos sólo para empezar el año. Aunque eso sí, tuvieron un poco de suerte, como sus hijos estudian en el mismo colegio, obtuvieron un descuento en colegiaturas y reinscripciones debido a su preferencia por ese instituto.
“De ahí me ahorré unos 15 mil pesos, más o menos”, dice Nora.
Las cuentas no paran ahí, a eso hay que sumar las actividades extracurriculares, deportivas o culturales que sus hijos elijan a lo largo del año, y también deberán sumar los nueve mil 200 pesos que pagarán cada mes como colegiatura de sus tres hijos en secundaria y mil 600 pesos por el que va en la primaria.
“Sí es ‘costosito’ tenerlos en una escuela de paga, y eso que no es una escuela muy rimbombante y muy grande, es una escuela pequeña”, explica Nora.
Y así, las cuentas se vuelven interminables. Ese es sólo un caso de los que hay en cada una de las 77 escuelas primarias y secundarias privadas que están registradas ante la SEP en la zona de Xochimilco —donde viven Nora, Antonio y sus cuatro hijos—, o de las mil 701 escuelas públicas que hay en toda la ciudad, donde el promedio de gasto por estudiante, entre libros, zapatos, uniformes y lista básica de útiles escolares, es de tres mil 500 pesos, según datos de la Procuraduría Federal del Consumidor (Profeco).
AHORRAR DONDE SE PUEDA
Esta historia se repite cada año para miles de padres de familia, los costos de los útiles escolares se incrementan entre 5% y 10%, de acuerdo con las previsiones del presidente de la Cámara de Comercio, Servicios y Turismo en Pequeño de la Ciudad de México (Canacope), Gerardo López, quien estima una escalada de precios ante la tensión económica que viven varios negocios, con las librerías.
“Un libro de lectura o un libro de texto, si ahorita puede costar 120 o 130 pesos, puede llegar a un costo de 160 o 180 pesos”, dice.
Y entonces, vienen las recomendaciones para ahorrar donde se pueda. Gerardo López de la Canacope dice, por ejemplo, que hay que comprar los artículos escolares con mucho tiempo de anticipación, y así encontrar verdaderas ofertas y no las que hay una semana antes de que los niños regresen a clases.
“La única oferta (previo al regreso a clases) va a ser de la hoja que se rompe rápido, de la goma que no borra, de las plumas que no pintan. Esas serán las ofertas: de la mercancía defectuosa”, dice.
Otra estrategia, dice López, es evitar comprar los artículos de moda por ser —habitualmente— los más caros; en su lugar, dice, podrían reusar plumas, cuadernos y lápices que se encuentran dentro del hogar y que todavía sirven.
Cuando los padres son más organizados, incluso se puede ahorrar más. El director de Retención de Financial Group México, Alan Gómez, recomienda asociarse con otros padres de familia para comprar con ellos en tiendas de mayoreo y dividirse los materiales escolares.
“Comprar en grupo te puede ayudar a reducir el costo de muchas cosas”, recomienda Gómez, especialista en finanzas personales, quien sugiere también prever los gastos que se dan a lo largo del año, como las actividades extracurriculares que tendrán los niños al terminar su día escolar.
Es el caso de Nora y Antonio, por ejemplo, quienes ya se preparan para pagar, en enero, el inicio de la temporada de futbol americano de uno de sus hijos, que les costará más de siete mil 500 pesos.
“Si no alcanza, pues a ‘tarjetazo’ y nos vamos emparejando con la tarjeta de crédito. Lo mandamos a veces a meses sin intereses y ya esperamos”, dice Nora.
CONTRACORRIENTE
Los padres de familia, en cada regreso a clases, tienen una cuesta difícil. De acuerdo con Alan Gómez, cada año las familias destinan 13.6% del ingreso familiar en la educación de los hijos de primaria y secundaria, pero en la universidad, se incrementa hasta 20%.
La apuesta de Nora y Antonio es que cuando sus hijos estudien la preparatoria en una escuela pública para que tengan mayores posibilidades de ingresar a universidades como la UNAM o el Politécnico.
ESTIRÁNDOLE MÁS
Si te agarraron las prisas, acude a las ferias de útiles que organiza la profeco.
En el Distrito Federal, se llevarán a cabo en agosto cinco ferias de útiles escolares donde podrás encontrar buenos precios y calidad.
Estas ferias serán en la explanada delegacional de Gustavo A. Madero, del 17 al 21; la esquina de Francisco del Paso y Fray Servando, del 10 al 14; en la esquina de Río Churubusco y avenida Te, del 10 al 14; en la Macroplaza de Iztapalapa, del 15 al 23, y en la explanada de la delegación Cuajimalpa del 21 al 24 de agosto.
NO HAY DE OTRA, SÓLO ECONOMIZAR
La única manera de que la educación sea menos costosa es ahorrar en donde se pueda, como en los materiales.
1. ANTICIPA: Parece letanía, pero compra los útiles con tiempo y trata de no dejarlo para el final. Entre más tardes, más caro te saldrá.
2. RECICLA: Reusa lo que puedas, esa goma que no se acabó o esos lápices a los que aún se les puede sacar punta.
3. HAZ EQUIPO: Júntate con algunos padres de familia para comprar útiles escolares al mayoreo, ahí encontrarás un verdadero ahorro.
DATOS QUE TE INTERESAN
*30% del costo total por el regreso a clases puede evitarse si se compra con tiempo.
*10 mil pesos por estudiante puede costar el regreso a clases en una escuela privada.
*3500 pesos cuesta en promedio el regreso a clases en una escuela pública.
