Aunque reduciría el tráfico, el estrés y la contaminación, el gobierno del DF no ha promovido el trabajo a distancia en la ciudad.
Casi son las nueve de la mañana. A esta hora, el Circuito Interior va a vuelta de rueda, repleto de automovilistas frustrados de no poder llegar a tiempo a la oficina, Jonás Vázquez está frente a la computadora de su casa, aún en pijama, mandando correos electrónicos y haciendo llamadas.
Algo similar a lo que vive Aurora Adame, quien se levanta a las 4:30 de la mañana a trabajar en su casa. A las seis de la tarde ya está libre para atender a su hija y, cuando tiene eventos personales, no tiene que andar pidiendo permiso, porque trabaja con base en resultados y no en horarios.
El home office, trabajo desde casa o teletrabajo, es una tendencia mundial que, gracias a internet, genera mayor calidad de vida a quienes lo aplican y podría ayudar a reducir la contaminación en la ciudad, el estrés, la improductividad, el ausentismo y la congestión vehicular. Se trata de hacer lo mismo que en una oficina, pero a distancia, en el hogar o el lugar que más convenga, enfocándose en metas de productividad.
Estimaciones del Instituto Mexicano para la Competitividad (IMCO) calculan que por los congestionamientos viales en el DF se pierden 3.3 millones de horas-hombre (una medida para calcular la productividad), es decir, tres de cada 40 años de vida productiva por persona, lo que equivale a una merma de 33 mil millones de pesos anuales: más que el presupuesto 2012 de la UNAM.
IDEAS EN PAPEL
En la ciudad, el Programa para Mejorar la Calidad del Aire del Valle de México (Proaire) 2011-2020 estableció como una de sus prioridades impulsar el home office para disminuir la contaminación, pero la medida no ha sido promovida por el GDF, aunque fue recomendada por expertos en medio ambiente, ya que reduce el gasto en agua y energía de las oficinas.
Leonardo Martínez, asesor de Proaire, explica que a la fecha no se tiene conocimiento de que el gobierno haya fomentado esta disposición entre empresas de la capital, a pesar de que, según el cronograma, ya debería estar aplicándose en 2015.
Al cierre de esta edición no ha habido respuesta por parte de la Secretaría del Medio Ambiente (Sedema) local sobre el olvido de esta propuesta.
Para Maite Ramos, presidenta de la Comisión de Movilidad de la Confederación Patronal de la República Mexicana (Coparmex), hace falta regular bien este tipo de alternativas laborales y hacer pruebas piloto para tener mediciones reales de sus beneficios. Pero, explica, es una medida de aplicación rápida por la que las empresas en el DF podrían recibir un estímulo desde el gobierno, como descuentos en el Impuesto Sobre la Nómina.
PONIENDO EL EJEMPLO
En las oficinas de la empresa Unilever, el home office es una política que lleva cuatro años funcionando, como parte del programa Agil Working, con la intención de dar bienestar a sus empleados y aumentar su productividad.
Allí, al menos 60% de los trabajadores asiste esporádicamente a la oficina. “Hay flexibilidad para que el empleado sea creativo, haga su propuesta y plantee y acuerde con su jefe cómo va a ser la forma de trabajo”, dice Ana Orihuela, responsable del programa.
Las ventajas también son económicas, pues los gastos de traslado y comida se reducen. David Aguilar, directivo de una empresa constructora, trabaja y come en casa. Con 800 pesos a la quincena, desayuna, come y cena, a diferencia de cuando tenía que salir y gastar mil 500 pesos en dos semanas sólo para la hora de la comida. Además, si necesita distraerse, saca a sus perros a pasear para liberar su mente.
En México, el teletrabajo está regulado en la Ley Federal del Trabajo, como labor a domicilio. Pero Ángel Jiménez, especialista en derecho laboral de la Universidad de Guadalajara, asegura que la legislación es endeble y permite abusos.
Lourdes Cueto sabe de eso. A ella le dieron celular y computadora para que a fines de mes trabajara desde casa en los cierres contables de la empresa. Pero esas herramientas fueron su yugo. “Cada fin de semana querían algo. Me hablaban a las 11 de la noche del sábado o a las 10 de la mañana del domingo, que eran mis días de descanso”, platica.
Además de la “disponibilidad” ilimitada que ella sufrió, otras desventajas identificadas del teletrabajo son el aislamiento, la confusión entre la vida privada y la profesional, el hecho de que no se reembolsan los gastos de electricidad o del equipo de trabajo, el miedo a la pérdida de promoción laboral y la adicción al trabajo que puede provocar esta nueva forma de empleo.
SIGUE ESTOS PASOS PARA APROVECHAR AL 100% EL TRABAJO DESDE CASA
- Sé organizado en tiempos y actividades, prepara un calendario para evitar perder tiempo.
- Destina un lugar específico para tu trabajo en casa, escoge un espacio o lugar que pueda servir de buró.
- Báñate y vístete como si fueras a ir a la oficina, mantén una constante higiene de trabajo.
- Establece horarios de comida regulares.
- Informa a tus familiares que no estás descansando y que deben tener en cuenta tus horarios laborales.
CIFRAS:
22 millones de viajes se hacen todos los días en la ZMVM.
40% se dirige a Cuauhtémoc, Miguel Hidalgo o Benito Juárez.
200 mil vehículos se suman cada año al parque vehicular.
¿QUÉ PODRÍA CAMBIAR EL HOME OFFICE?