Hay algo atractivo en lo secreto, lo exclusivo, lo under… los bares speakeasy tienen una ventaja contra los comunes: el misterio atrae. Te decimos por qué vale la pena descubrir los de esta lista
En realidad se hicieron populares durante la Ley Seca (1920-1933), esos 13 años en los que la venta de alcohol estuvo prohibida en todo Estados Unidos. Lo prohibido es más deseable, así que la vida nocturna y la coctelería tuvieron un auge exponencial en clubes ocultos en sótanos, edificios abandonados o detrás de las puertas cerradas de locales comerciales, tanto en EUA como en ciudades mexicanas de la frontera.
Aunque no está prohibido beber una cuba a plena luz del día en la CDMX, esa cultura de los clubes secretos se coló hasta la vida nocturna chilanga. Acá te contamos de nuestros favoritos. Hay de todo: bares de coctelería, fiestas en depas, sesiones de jazz y salones de baile. Viven en la legalidad, pero emulan la atmósfera de lo oculto.
Contrabarra
Es nuevo y está en un bajopuente en Polanco. Es parte del mercado gastronómico La Morera. Échate unas auténticas caguamas banqueteras —aunque fifís— en un punto absolutamente chilango, en medio del encantador caos citadino.
Masaryk s/n, esq. con Av. F. C. de Cuernavaca, Col. Polanco; lun–mié: 12:00-19:00, jue-sáb: 2:00-2:00; $200-$500
Hanky Panky
Es el bar secreto más famoso en la ciudad. Todo mundo sabe de él, pero no todos han disfrutado de su coctelería espléndida. Ofrecen un sistema de membresía para que vayas cuando quieras y tengas acceso a sus eventos con bartenders invitados de otras ciudades hip en coctelería. Si no tienes membresía puedes ir, pero con reservación.
Ubicación secreta, reserva al 55 9155 0958; mar-sáb: 18:30-2:00; $500-$900, membresía: $3,000 al año
Departamento
Se arman buenas fiestas con excelente propuesta musical y djs invitados. Es recomendable llegar temprano para que disfrutes mejor de sus viniles, mezcales, cocteles y chelas artesanales.
Álvaro Obregón 154, Col. Roma Norte; mar-sáb: 21:00-3:00; $200-$500
Rabioso
Un bar que tienes que conocer si lo tuyo es el skate y la comida atascada. Escondido en el Centro, junta en un mismo lugar las colosales Hamburguesas Mataleón y las inigualables pizzas del Perro Negro, cocteles, cerveza y ¡bowls para patinar!
Donceles 64, Centro Histórico, lun-dom: 9:00-23:00, $$ ($200-$500)
Café Aurora
Es un club de jazz y arte. Lupita (poeta y cocinera) y Aarón (músico) organizan tertulias con artistas mexicanos o de otras partes del mundo. A veces hay concierto de jazz clásico o de música experimental. Otras hay cine de arte o lecturas de poesía. Siempre hay comida rica hecha por Lupita y vino, chela o mezcal que lleva algún productor artesanal. Checa sus eventos en su página de Facebook: CaféAuroraPortales.
Conocerás la dirección al reservar tu lugar en el 55 3104 8709; $200-$500
La Cantera Huasteca
Es un bar y sala de conciertos y bailongo que ha existido bajo su aura clandestina desde los 70. Es un espacio huapanguero. Aunque también se bailan otros géneros, su escenario es plataforma para que agrupaciones huapangueras se den a conocer. No hay letrero en la fachada ni nada que lo anuncie.
Av. Cantera 116, Col. Estanzuela; sáb-dom: 15:00-2:00; $200-$500
Rockmore
Es un club de música con un sistema de audio supremo. Aquí se presentan cantantes, djs y bandas de distintos géneros cada semana —y se hacen grabaciones en vivo—. El lugar es pequeñito y exclusivo, así que se siente como un concierto privado con comida rica y coctelitos bien hechos. Está escondido en un restaurante de cocina oaxaqueña de Polanco.
Molière 48, Col. Polanco; eventos, horarios y reservaciones a [email protected]; $500-$900
El Mestizo
No está oculto. Si caminas por la avenida Yucatán lo encontrarás abierto con unas cuantas mesitas adentro y afuera. Comerás rico y beberás buen mezcal artesanal (que sirven helado) y chelas en un ambiente tranquilito. Peeero, ya que caiga la noche se armará el perreo en el patio de atrás.
Yucatán 28D, Col. Roma Norte; lun-mar: 14:00-19:00, mié-vie: 14:00-2:00, sáb: 19:00-2:00; $500-$900
Tokio Music Bar
No se anuncia como speakeasy, pero sí tiene una esencia de exclusividad, quizá porque está pequeñito (y para que no se abarrote se reservan el derecho de admisión) y porque está oculto al transeúnte (te dejan pasar solo si ya sabes a dónde vas). La música es deliciosa (puro vinilo) y los cocteles muy bien hechos.
Río Pánuco 132, Col. Cuauhtémoc; lun-sáb: 18:00-2:00; $500-$900
Casa Franca
Un club de jazz escondido en una antigua casona de la colonia Roma. Entrar en él se siente como viajar en el tiempo a algún speakeasy en Nueva York en la década de los 20. Siempre hay bandas de jazz, soul y bossa. En su carta hay tapas, botanitas, cocteles y vino (aunque su selección no es muy amplia).
Mérida 109, Col. Roma Norte; mar–sáb: 18:00–2:00; $250–$300
Yucatán 28D, Roma Norte, lun-mar: 14:00-19:00, mié-vie: 14:00-2:00, sáb: 19:00-2:00, $$$ ($500-$900)
Tokio Music Bar
No se anuncia como speakeasy pero sí tiene una esencia de exclusividad, quizá porque está pequeñito (y para que no se abarrote se reservan el derecho de admisión) y porque está oculto al transeúnte (te dejan pasar solo si ya sabes a dónde vas). La música es deliciosa (puro vinilo) y los cocteles muy bien hechos.
Río Pánuco 132, Col. Cuauhtémoc, lun-sáb: 18:00-2:00, $$$ ($500-$900)
Casa Franca
Un club de jazz escondido en una antigua casona de la colonia Roma. Entrar en él se siente como viajar en el tiempo a algún speakeasy en Nueva York en los 20. Siempre hay bandas de jazz, soul y bossa. En su carta: tapas, botanitas, cocteles y vino (aunque su selección no es muy amplia).
Mérida 109, Col. Roma Norte, mar–sáb: 18–02, $250–$300