Debo confesar que lo primero que me vino a la mente cuando escuché sobre la Isla de Guam fue George Michael cantando “Wake Me Up”, pero supongo que esa es otra isla de Wham!…
La historia suele estar llena de ironía y justo cuando se cumplen 72 años del bombardeo nuclear sobre Nagasaki, Corea del Norte ha amenazado con lanzar cuatro misiles sobre Guam, la principal isla del archipiélago de las Marianas, desde donde despegaron los bombarderos estadounidenses B-29 que atacaron Japón con armas atómicas en 1945.
¿Pero por qué Kim Jong-un puso el ojo sobre esta pequeña isla de apenas 549 km cuadrados de extensión, después de que Trump prometiera un diluvio de “fuego y furia” contra Pyongyang?
Descubierta por Fernando de Magallanes en el siglo XVI, la isla de Guam se convirtió en una escala obligada de las embarcaciones españolas, quienes la colonizaron por más de 300 años hasta su cesión a Estados Unidos tras la guerra hispano-estadounidense de 1898.
Actualmente, Guam tiene el estatus de “territorio no incorporado”, lo que quiere decir que sus habitantes cuentan con la nacionalidad estadounidense, pero no pueden participar en las elecciones presidenciales.
Su ubicación a tan solo 3,500 km de Corea del Norte la coloca como un puesto estratégico para el ejército norteamericano. De hecho, la isla de Guam es apodada como “la punta de lanza” tanto por su forma como por su importancia militar al ser el territorio estadounidense más cercano al continente asiático, siendo de gran ayuda durante las guerras de Corea y Vietnam.
La isla cuenta con su propio sistema avanzado antimisiles, llamado THAAD (Terminal High Altitude Area Defense), y tal vez esa sea la razón por la que el gobernador de la isla Eddie Calvo terminara por hablar de otros asuntos con Donald Trump en una llamada que, por cierto, se dio el lujo de grabar y, posteriormente, subir a YouTube.
Y mientras el mundo se mantenía en alerta ante un posible ataque nuclear, Donald Trump tomó el teléfono para llamar al gobernador de Guam y decirle antes que nada: “Eddie, tengo que decirlo, te harás extremadamente famoso. No vas a tener ningún problema. Estamos con ustedes al 1,000%. Están hablando de Guam y están hablando de ti. Y puedo decirte que el turismo va a subir como diez veces… y sin gastar nada”.
De nueva cuenta, no perdamos de vista que se está hablando de un inminente ataque nuclear… Así que, mientras Trump habla del turismo, ¿cuál sería la respuesta del gobernador Calvo? “Nunca me he sentido más seguro que con usted manejando el timón”.
Así, la isla de GUAM vive sus horas más tensas en décadas… Aunque, claramente, a ninguno de sus gobernantes parece importarle realmente.