Vacaciones, dices de ese momento en donde solo te imaginas postrado en un camastro, disfrutando del sol, el mar y la arena, pero que en realidad viene precedido de un verdadero viacrucis
No son nuestros nervios ni mucho menos nuestra imaginación. Durante las últimas décadas, las aerolíneas se han dedicado a reducir considerablemente el espacio entre las filas de asientos, pero no solo ello, sino que también han reducido el tamaño de los mismos lugares ¡convirtiendo cualquier viaje en una verdadera clase de contorsionismo!
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Todos lo hemos vivido: niños pateando el asiento, personas que reclinan su respaldo a todo lo que da sin decir agua va y uno rezando pa que no sirvan comida, porque en ese diminuto espacio claramente la mesita no va a bajar.
De acuerdo con datos oficiales, la separación entre asientos de un avión en clase económica pasó de tener 89 centímetros en la década de los 70, a los 71 o 75 centímetros en la actualidad.
Y es que, al día de hoy, no hay una normativa que obligue a las aerolíneas a dejar cierto espacio entre asiento y asiento, por lo que, incluso, los propios lugares se han reducido hasta en cuatro centímetros de ancho.
¡Pero eso está por cambiar! Y es que una corte de Estados Unidos ordenó a la Administración Federal de Aviación Norteamericana a realizar un estudio mediante el cual se establezca una reglamentación en la que se contemple cuál es el tamaño mínimo de los asientos, así como el espacio mínimo requerido entre fila y fila, para que se garantice la seguridad de todos los pasajeros.
El caso fue bautizado como el “Increíble caso del asiento reducido” y enfoca sus argumentos en la seguridad de los pasajeros, toda vez que las aerolíneas suelen ser muy estrictas en sus procedimientos de seguridad, excepto cuando se trata de garantizar que los pasajeros cuenten con suficiente espacio para evacuar la aeronave en caso de alguna emergencia.
Y es que cual microbús que aplica el “favor de recorrerse hacia atrás” cuando va hasta el copete, las aerolíneas siguen anunciando recortes en el espacio que existe entre sus asientos.
American Airlines reveló el mes pasado que reduciría dos centímetros más el espacio entre asientos de sus Boeing 737 MAX, mientras que United también anunció que recortaría hasta los 73 centímetros el espacio de los asientos en algunas de sus aeronaves.
Por ahora, la Administración Federal de Aviación tendrá seis meses para evaluar esta petición, y esperemos que escuchen nuestras súplicas, o al menos se suban ellos a un avión en clase económica para que vivan en carne propia lo que significan estos recortes al espacio entre filas…. Pues, como dicen por ahí, no todos viajamos en business.