La Comisión de la Verdad de Oaxaca (CVO), de la cual formo parte, es un órgano autónomo que se creó legalmente para investigar los hechos que motivaron posibles violaciones a los derechos humanos del pueblo oaxaqueño en 2006 y 2007. Desde el inicio de este año, en esta instancia presidida por el padre Alejandro Solalinde, trabajamos en la integración y redacción de un informe final, el cual será entregado de manera formal a las autoridades el próximo 29 de febrero.
De cara al cierre de nuestros trabajos, el Partido Democrático Popular Revolucionario-Ejército Popular Revolucionario (PDPR-EPR) difundió una misiva dirigida a la CVO en la que denuncian que en diversos lugares de Oaxaca “fueron enterrados clandestinamente luchadores sociales y víctimas del terrorismo de Estado en los años 2006 y 2007”.
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Pocos días después, la CVO emitió un comunicado en el que se da a conocer lo siguiente: a partir de información entregada con antelación por el PDPR-EPR, así como también gracias a otros testimonios especiales recolectados durante el transcurso de nuestra investigación, fueron detectados lugares en los cuales podrían haberse llevado a cabo inhumaciones clandestinas de activistas. Tratándose de información delicada y de alta prioridad, la CVO tomó la decisión de iniciar las gestiones correspondientes ante las instituciones oficiales encargadas de la administración de justicia en Oaxaca y en el país, con el fin de llevar a cabo las acciones requeridas.
Desde el mes de noviembre del año 2015, la CVO abrió una Averiguación Previa en la Fiscalía para Delitos de Trascendencia Social de Oaxaca e hizo la diligencia requerida ante la Subprocuraduría Especializada en Delincuencia Organizada (SEIDO) de la Procuraduría General de la República (PGR), con el fin de que se resguardaran e inspeccionaran una serie de domicilios para confirmar o descartar la existencia de estas fosas clandestinas. Hasta la fecha, ninguna de estas dos instancias ha ofrecido una respuesta a este proceso formal que iniciamos.
Ante tal situación, fue que pedimos a la Procuradora General de la República, Arely Gómez González, así como al Fiscal General del Estado de Oaxaca, Joaquín Carrillo Ruiz, a que emprendieran las acciones necesarias para investigar lo sucedido en los domicilios entregados por la CVO, así como también, garantizar que los lugares donde presumiblemente se cometieron estos crímenes, no sean alterados con el fin de eliminar las evidencias.
En cualquier caso, la Comisión de la Verdad de Oaxaca integrará de manera detallada la información de estas presuntas fosas clandestinas en su informe final.
TARUMBA
Luego de dar a conocer esta denuncia, cierto funcionario público aseguró tajantemente que en Oaxaca no había fosas clandestinas, lo cual es, en cierto sentido, algo cierto: No existen fosas clandestinas en Oaxaca, pero porque las autoridades no las están buscando.
