El vuelo de Malaysia Airlines MH370 despegó a las 00:40 de Kuala Lumpur con 227 pasajeros y 12 integrantes de la tripulación y llegaría a Pekín a las 6 y media de la mañana. A la 1:30 de la mañana hizo su último contacto en radio. Nunca más se supo del vuelo, de su paradero ni destino final.
A la mañana siguiente, empezó una frenética e infructífera serie de búsqueda por la verdad y el lugar final de este avión. La especulación es amplia y se han repasado teorías de lo probablemente ocurrido. Con cientos de personas involucradas en la búsqueda, se han revisado miles de datos.
De todas las versiones que he escuchado hay una particularmente siniestra por lo macabra pero también por lo altamente probable de lo aconteció a ese avión hace mas de cuatro meses.
Como es habitual en esos vuelos, los pasajeros suben ya cansados y duermen casi todo el trayecto. Esta dicho que subieron pasadas las 11 de la noche y se prepararon para un viaje ‘red eye’ -como se les conoce- ya que todos bajan con los ojos rojos por dormir mal en el avión.
La nave despegó a tiempo y a casi una hora de vuelo reportó a la torre de control todo normal. Lo que sucedió después, con toda seguridad es aterrador. Es probable que se haya desatado un fuego y falla masiva en el sistema eléctrico. Sin instrumentos y sin comunicación, el piloto, hombre de amplia experiencia, decidió subir a mas de 40 mil pies para sofocar el fuego.
Al ver que no lo lograba o de que las cosas estaban muy mal en el avión, desciende a menos de 10 mil pies y da una vuelta de 180 grados para enfilarse hacia una población en la punta de la isla que acaban de dejar.
A esa altura el avión no se encontraba dentro de las vías aéreas lo cual disminuía el riesgo de accidente o colisión con otra nave.
Y ahí, en ese momento, asfixiados por el humo del incendio todos los tripulantes mueren. Durante las siguientes 7 horas, el avión se desplaza sobre el Océano Indico, con 239 personas muertas en su interior. Hasta que el combustible se termina y la nave se desploma al fondo de uno de los Océanos menos transitados tanto por naves aéreas como barcos.
Una escena digna de una película de terror.
Hoy sabemos que Australia inicia búsqueda en una zona en la que pudiera haber caído bajo esta hipótesis. La hipótesis del silencioso vuelo de la muerte.
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(LUCIANO PASCOE RIPPEY / @lucianopascoe)
