La temporada de cine de verano está por terminar, así que es buen momento para lanzar una lista sobre el mejor cine que he visto este año. Escogí siete películas: seis se estrenaron en el 2013; la otra se reestrenó hace relativamente poco, pero me pareció cine de tan alto calibre que no pude excluirla. Empecemos con Halley, de Sebastián Hofmann, una película mexicana, con guiños cronenberguianos, sobre un hombre que lenta (y literalmente) se deshace. Congruente en su estética, con un final desolador, la obra primera de Hofmann es un debut memorable y original.
The Place Beyond the Pines de Derek Cianfrance, también director de la magnífica Blue Valentine, es una historia sobre cómo los padres marcan el destino de los hijos, con destellos de virtuosismo técnico (nunca van a ver, ni escuchar, persecuciones en motocicleta como estas), que abreva no solo de las grandes novelas sobre familias, como Los Buddenbrook o La Trilogía del Cairo, sino de la tragedia griega. Extraordinario que un director estadounidense se atreva a hacer una película de esta escala en el 2013; aún más extraordinario que éste haya sido el resultado.
https://youtu.be/zhb2F5df4Vg
Side Effects, de Steven Soderbergh, fue la primera cinta que me llamó la atención en el 2013: narrada con herramientas hitchkockianas, impredecible y, sobre todo, entretenida. Ese adjetivo también le queda a Pacific Rim, de Guillermo del Toro, el mejor espectáculo veraniego de este año, muy por encima, tanto en fluidez como en la riqueza del mundo que retrata, de otras películas palomeras como la secuela de Star Trek o World War Z.
https://youtu.be/8R9H87zafc0
Este año también salió Trance, la última de Danny Boyle, una película que regresa al showman de las Olimpiadas a sus raíces. Aquí, como en Trainspotting, hay una obsesión por el mundo alucinatorio; y, como en Shallow Grave, hay una historia violenta sobre un grupo de individuos traicionándose entre sí por un botín. ¿Perfecta? En absoluto. Pero, ¿a quién no le gusta ver a Danny Boyle alejado de números musicales bollywoodenses, de vuelta en el terreno del cine áspero?
https://youtu.be/Jn-Kh0dcQcc
https://youtu.be/Jn-Kh0dcQcc
Finalmente está Wake in Fright, película australiana estrenada en Cannes 1971, y reestrenada en el 2009. No recuerdo otra cinta que narre con esta crudeza el descenso de un hombre al infierno. No hay cine más tenso. Véanla con un botecito de Tums al lado.
(DANIEL KRAUZE)