El cantante y músico italiano conmovió a la mayoría de los presentes, al cantar éxitos como “Bésame mucho”, de Consuelo Velázquez, y “Can’t Help Fallin’ In Love”, de Elvis Presley
Por Jorge Gaviño*
«Quien canta, reza dos veces» San Agustín
El cantante y músico italiano Matteo Bocelli se presentó en octubre por primera vez en el Teatro Metropólitan de la Ciudad de México.
En un concierto que se puede decir que conmovió a la mayoría de los presentes, al cantar éxitos como “Bésame mucho”, de Consuelo Velázquez, y “Can’t Help Fallin’ In Love”, de Elvis Presley , junto con canciones que entonó en español: “Mi historia entre tus dedos”, de Gianluca Grignani, y “Tu luz quedó”.
El joven en todo momento se mostró receptivo y atento a las muestras de afecto del público. No dudó en ponerse un sombrero de charro que una jovencita le obsequió. Luego de esto, el respetable comenzó a corear la frase “Matteo, hermano, ya eres mexicano”.
Durante la velada se pudo presenciar que el grupo etario era muy diverso. Había jóvenes, inclusive varios años menores a la edad de Matteo, personas mayores y adultos mayores, todos nosotros unidos por las canciones que cantaba el hijo de Andrea Bocelli.
Quizá una de las grandes virtudes de la música y de las canciones es que logran perdurar con los años y pueden unir a varias generaciones, que con entonar una melodía e inclusive tararearla se crea un vínculo único entre ellas.
Con el paso de los años, la entonación que se les da a las palabras o a las estrofas llegan a cambiar, pero las letras y las emociones que desprenden son las mismas.
Por ello, estimadas lectoras y estimados lectores, les recomiendo que vayan a un concierto; de preferencia vívanlo y no lo graben con sus celulares. En verdad disfrútenlo en plenitud poniendo toda la atención que tengan y sean sensibles a lo que ven, escuchan, sienten, perciben y acontece en ese momento.
La vida es eso, una colección de breves instantes y la mayoría de las personas que hemos tenido la oportunidad de ir a conciertos atesoramos en nuestra memorias algunos fragmentos de ellos.
Al joven Matteo Bocelli le deseo que tenga una carrera llena de éxitos. Vale la pena recordar que todos los artistas están obligados a no traicionarse a ellos mismos a cambio de ningún tipo de dádiva, ni tampoco pueden defraudar a su público, que es a quien ellos se deben.
Ojalá podamos seguir oyendo cantar a Matteo durante muchos años.
*Político y catedrático. Tiene maestría en Derecho Ambiental y doctorado en Ciencias Ambientales, ambos por la Universidad de Alicante, España