México exige una propuesta REAL que asuma los retos del sector energético, con metas que persigan el desarrollo y una mejora sustancial de una industria moderna para beneficio de todos los mexicanos. Encuestas señalan que 7 de cada 10 mexicanos está a favor del fortalecimiento de la industria energética nacional.
Discursos inerciales y propuestas alarmistas que atienden sólo a la iniciativa privada inundan la discusión de la Reforma Energética, no hablan de la falta de inversión, los errores de las administraciones pasadas, la falta de capacidad en materia recaudatoria y condenan el futuro de nuestras paraestatales. Afirman como única solución para el crecimiento nacional el facilitar la renta petrolera (95 de cada 100 dólares por barril) y los recursos naturales como patrimonio a las transnacionales.
La propuesta del Partido de la Revolución Democrática es modernizar sin privatizar, y materializar un caso de éxito mexicano. Reconoce el potencial de México, busca el incremento de recursos para fortalecer la capacidad de ejecución de Pemex y CFE, pues es conveniente económicamente convertirlas en las palancas de desarrollo que detonen la inversión, el sano desarrollo e integración de la industria, la tecnología, los recursos humanos, y la creación considerable de empleo en nuestro país y que permitirán que la renta petrolera crezca en beneficio de las nuevas generaciones.
Nuestra propuesta se sustentada por los 8 Ejes Estratégicos: Cambio en el Régimen Fiscal; Autonomía Presupuesta y de Gestión; Fortalecer a la Sener y a la CNH; Tarifas, precios y subsidios para un acceso equitativo a la energía; la creación del Fondo de Estabilización de Ingresos Petroleros como Organismo financiero; impulsar la Investigación y Desarrollo Tecnológico; Transición energética, cuidado al Medio Ambiente y Desarrollo Sustentable, sin olvidar la erradicación de la corrupción de funcionarios y sindicatos.
En el PRD tenemos un compromiso con México, y contamos con una propuesta de Reforma Energética MODERNA, RESPONSABLE, INTEGRAL, VIABLE, SUSTENTABLE y POSIBLE. Afirmamos que el Estado mexicano debe mantener la dirección y conducción central, garantizar la seguridad energética, el bienestar y el desarrollo nacional. Y sostenemos que no es necesario hacer cambios a nivel constitucional.
(LUIS CHÁZARO)