Diría un clásico: elemental mi querido Watson ponga la basura en su lugar. Y el mensaje va para el ciudadano, el delegado, el del camión y cualquiera que aprecie su ciudad.
Se necesitan tres cosas básicas:1.- Mínimo, colocar 25000 basureros en toda la gran metrópoli.2.- Campañas masivas de concientización.3.- Invitar al Sector Privado para que colabore con el GDF.
En días pasados los inchas japoneses en el Mundial de Brasil recogieron su basura luego de terminado el partido. Eso lo dice todo, es un tema de educación. En México no hay consideración por el prójimo.
Con la llegada de las lluvias, se evidencian nuevamente los problemas de infraestructura hidráulica y la falta de una política atinada para mitigar sus afectaciones a los capitalinos; claros ejemplos de ello son las 2,037 demandas ciudadanas relacionadas con las lluvias recibidas por la AGU, en sólo una semana. Y es que, es indispensable desarrollar una política integral, que no sólo se constriña a desazolvar coladeras, sino que vaya mas allá; con fuertes inversiones a nuevos y mas complejos sistemas de recuperación de aguas de lluvia, su distribución y manejo; el mantenimiento, rehabilitación y sustitución del sistema de drenaje; todo ello, en conjunto con una visión que incluya las necesidades de los usuarios de la red pública de transporte, sobre todo en aquellas zonas mas afectadas, verbigracia los 95 puntos de riesgo (focos rojos) referidos por el gobierno capitalino.
Es la medida más costosa, la que lleva más tiempo: la de asumirse ciudadano.La de no creer que lo que tiramos y ocultamos no existe.En lo material y en los demás sentidos.
Se necesitan acciones conjuntas de la población en general y el gobierno de manera coordinadas.Por una parte, difusión de campañas por parte del gobierno para concientizar a la población de las repercusiones de tirar desechos en la calle y por otro lado, las acciones preventivas del gobierno para la limpieza y sanitación del drenaje profundo.
La generación de basura ha aumentado significativamente en los últimos años: en 1995 se generaban 850 gramos de basura por persona y hoy se producen 1.9 kg (más del doble). Esto no sólo ha incentivado la creación de tiraderos clandestinos, sino que ha dificultado el tratamiento de los residuos sólidos.El gobierno debe redoblar esfuerzos para crear una cultura ambiental y lograr que la gente entienda la importancia de depositar la basura en su lugar. Pero esto no es suficiente para evitar más inundaciones.Es necesario que se atiendan otros fenómenos que, al afectar la infraestructura hidráulica y el drenaje profundo, impiden el desalojo de las aguas residuales y pluviales del Distrito Federal.Me refiero a los hundimientos provocados por la sobreexplotación de los acuíferos y las invasiones en zonas de reserva ecológica.El gobierno capitalino debe atender todos estos frentes si en verdad quiere solucionar el problema.