Apple no las pasa nada bien. La obsesión por sacar cosas novedosas y atraer nuevos consumidores han causado que, una tras otra, se cometan pifias, errores que crecen al tamaño de la marca de la que emanan.
Calentamientos inusuales, materiales más frágiles que los usados en tiempo de Steve Jobs, hoyos que vulneran la seguridad de nubes y sistemas operativos tradicionales, delgadez que conlleva a fragilidad extrema.
Entre la más reciente, un sistema operativo que transformaba en ladrillos iphones y ipads. El horror tecnológico.
No es raro, las decisiones empresariales de Cupertino tienen mucho que ver con las necesidades del consumidor que, al ritmo de la calle, desea obtener más información en menos tiempo.
El hecho es que el usuario desea tener en sus dispositivos un reflejo de la paranoia cotidiana en la que está, estamos inmersos.
La gran mayoría de ustedes realiza otra actividad mientras lee este diario. Toma un café, revisa noticias en su smartphone, hace una llamada, obtiene bases de datos en su laptop o escucha música.
Fuerzan la maquina.
Muchos pensarán que el realizar más de una actividad es un buen ejercicio cerebral, esto ante la idea arraigada de que el cerebro solo utiliza un 10 por ciento de su capacidad -lo cual es relativamente cierto-. La realidad, al parecer, es otra.
La Universidad de Sussex en Gran Bretaña lanzó los resultados de una investigación realizada a 75 ingleses. En ella, se concluye que individuos acostumbrados al multitasking -o a estar del tingo al tango- reducen su materia gris en la corteza anterior del cerebro, la zona donde la toma de decisiones y las emociones se entrelazan.
Dicho de otras palabras, al tener tanta cosa y tanta acción en el cerebro, este se achica y, a la vez, pierde capacidad para sintetizar alegrías.
Si se sienten tristes por mucho trabajo, tal vez hay algo químico en ello.
La razón puede ser hasta lógica: si ustedes usan una computadora con muchas ventanas abiertas, es claro que el procesador hará más lento el desarrollo de los procesos.
Lo mismo sucede al cerebro que no solo procesa información dura sino que, además, debe de realizar las acciones contidianas y básicas de subsistencia. Respirar, funciones básicas corporales. Vivir.
Por parecernos tanto a las maquinas terminaremos como algunas de ellas: obsoletas, como celular convertido en ladrillo por la actualización del IOS 8.
Mejor no forzar la máquina. Mejor ser así: simple.
(Gonzalo Oliveros / @goliveros)